..Redacción.
En la crisis del coronavirus la sanidad privada ha apostado fuerte por “arrimar el hombro”. Marta Villanueva, directora general de la Fundación IDIS, cuenta a iSanidad lo que está aportando. Asegura que la disponibilidad y lealtad de la sanidad privada es absoluta.
Los hospitales privados, ¿están en la misma situación que los públicos en cuanto a material de protección y presión asistencial en esta crisis sanitaria?
Sí. Se hacen necesarios recursos porque la actividad de la sanidad privada se ha multiplicado, con un ritmo de trabajo muy superior al habitual. La seguridad de nuestros profesionales es lo primero y por eso reclamamos que esos equipamientos lleguen a quienes están en la primera línea de trabajo.
En zonas consideradas de transmisión comunitaria como Madrid o País Vasco, ¿Los centros privados están haciendo pruebas diagnósticas de Covid-19?
Desde el principio y siguiendo las estrictas normas que ha establecido el mando único en la gestión de esta crisis sanitaria, nuestra disponibilidad y lealtad con la solución a este grave problema es absoluta.
La actividad se ha multiplicado, pero la seguridad de nuestros profesionales es lo primero, por eso reclamamos equipamiento de protección
¿Han tenido que retrasar procesos asistenciales por el coronavirus?
Una de las medidas contempladas por los centros asistenciales es la de posponer las intervenciones programadas no urgentes para contribuir a dotar de una mayor capacidad asistencial a los centros teniendo en cuenta a los pacientes infectados por el COVID-19. En estas situaciones es muy importante establecer claramente las prioridades y gestionar con acierto y firmeza los recursos disponibles teniendo en cuenta las necesidades que plantea una situación de crisis como la que vivimos actualmente.
Una de las medidas contempladas por los centros asistenciales es la de posponer las intervenciones programadas no urgentes
¿Cómo está siendo la colaboración de la sanidad privada con el sistema sanitario público?
Desde el principio absoluta, total, sin fisuras, la situación lo exigía y lo exige y por ello el sector de la sanidad de titularidad privada consciente de su compromiso puso al servicio de la sociedad todos sus recursos. Desde la promulgación del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19 todo el sistema sanitario queda bajo un mando único el del ministerio de sanidad teniendo en cuenta las responsabilidades y normas interpuestas también por las propias comunidades autónomas. La sanidad privada forma parte de la solución al problema y por lo tanto aboga por una estrategia coordinada de todos los agentes implicados en esta extraordinaria y compleja situación.
La sanidad privada forma parte de la solución al problema y, por lo tanto, aboga por una estrategia coordinada
¿Qué instalaciones privadas están siendo requeridas por el Ministerio de Sanidad?
El Real Decreto determina un mando único encabezado por el presidente del Gobierno y con autoridades competentes delegadas, en sus respectivas áreas de responsabilidad (Ministra de Defensa, Ministro del Interior, Ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y el Ministro de Sanidad) que es el responsable de la gestión directa de la crisis y en este sentido en relación con su pregunta el artículo 12 de “Medidas dirigidas a reforzar el Sistema Nacional de Salud en todo el territorio nacional” deja perfectamente diáfano y claro en los puntos 4 y 6 respectivamente que las medidas contempladas en el Real Decreto “garantizarán la posibilidad de determinar la mejor distribución en el territorio de todos los medios técnicos y personales, de acuerdo con las necesidades que se pongan de manifiesto en la gestión de esta crisis sanitaria. Y será el Ministro de Sanidad quien podrá ejercer aquellas facultades que resulten necesarias a estos efectos respecto de los centros, servicios y establecimientos sanitarios de titularidad privada”.
La colaboración privada-pública es esencial para dotar de viabilidad y sostenibilidad al sistema
Esta colaboración con el sistema sanitario público, ¿podría mantenerse una vez superada esta crisis sanitaria?
Como venimos diciendo desde la constitución de la Fundación IDIS, la colaboración privada-pública es esencial para dotar de viabilidad y sostenibilidad al sistema. Pretender afrontar en solitario todos los retos que tenemos por delante derivados del cambio sociodemográfico, el envejecimiento poblacional, la cronicidad, la innovación incesante, las nuevas formas de enfermar muchas derivadas del cambio climático que estamos ya padeciendo, los movimientos migratorios, los desplazamientos poblacionales hacia las grandes urbes, la baja natalidad, etc… es harto complejo y lo único que puede garantizar es el bloqueo del sistema sanitario de titularidad pública, una vez que cerca de 11 millones de españoles bajo cobertura del seguro privado de salud lo descargan de presión asistencial y financiera.
No hay ninguna duda de que si al sistema sanitario privado le fuera mal al público también le iría mal y viceversa. La simbiosis entre los dos modelos es esencial y quien no lo entienda así que contemple los países de nuestro entorno geográfico. El ejemplo evidente de que la cooperación y la estrategia conjunta en materia de salud y sanidad es imprescindible lo tenemos en la crisis sanitaria que estamos viviendo.
Si al sistema sanitario privado le fuera mal, al público también le iría mal y viceversa
¿Cómo están gestionando con sus pacientes crónicos y/o polimedicados las recetas de sus tratamientos para evitar que tengan que desplazarse a los centros de salud? ¿Está funcionando la receta privada electrónica?
El tema de las recetas de continuidad de tratamiento en procesos crónicos está resuelto especialmente en situaciones como la que estamos viviendo. Lo que prima siempre es la seguridad y comodidad de los pacientes en aras a que hagan un seguimiento adecuado de las recomendaciones terapéuticas que le ha hecho su médico. En procesos agudos es evidente que la prescripción del tratamiento se realiza en el momento de la consulta contemplando la prescripción la pauta posológica recomendada. En relación con la receta privada electrónica ya comentamos desde todos los agentes implicados que se está en fase de una primera prueba piloto en la Comunidad Autónoma de Cantabria y que el objetivo es que esté implantada en toda España a finales de este ejercicio 2020.
Artículos relacionados
- Fundación IDIS defiende la contribución de la sanidad privada ante la pandemia