..Juan Pablo Ramírez. Director de iSanidad.
El Dr. Jesús Vaquero siempre puso su conocimiento y su esfuerzo al servicio de la asistencia, la investigación y la docencia. Todo en beneficio del paciente. Este fin de semana hemos conocido su fallecimiento a causa del Covid-19. Esta crisis nos ha costado ya más de 20.000 vidas y nos ha hecho ver que nuestro Sistema Nacional de Salud requiere una transformación. Un camino de cambio que ya inició el Dr. Vaquero, jefe del Servicio de Neurocirugía del Hospital Puerta de Hierro-Majadahonda, catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid y titular de la Cátedra de Neurociencia de la Fundación Rafael del Pino.
El año pasado nos demostró que no solo el dinero hace avanzar a la ciencia después de alcanzar un hito histórico. La Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps) dio luz verde a la financiación de la primera terapia avanzada pública de fabricación no industrial. Tras 20 años de investigación y cuatro ensayos clínicos, el Dr. Vaquero vio como el fármaco NC1 para el tratamiento de la lesión medular espinal daba esperanza a un grupo de pacientes que hasta el momento carecían de alternativas terapéuticas.
Esta crisis nos ha costado ya más de 20.000 vidas y nos ha hecho ver que nuestro Sistema Nacional de Salud requiere una transformación, un camino de cambio que ya inició el Dr. Jesús Vaquero
En un país como España en el que los fondos de la investigación son escasos, este médico nunca perdió el tiempo en la crítica, jamás le venció el desánimo. Consciente de la importancia de la investigación, sabía que existen otros factores que mueven la ciencia. Los enumeraba en una entrevista a iSanidad: el tesón, la voluntad y el esfuerzo. “Actualmente, no es propicia la investigación en los hospitales, ya que hay que hacer unos esfuerzos enormes. Pero si se conjugara la investigación con la asistencia, que sería lo lógico, pues tendría mucho más sentido. Lo que pasa es que hay que tener mucha voluntad y, sobre todo, mucha paciencia”, nos contaba en esta entrevista hace prácticamente un año.
Son muchos los médicos, profesionales sanitarios y científicos que trabajan en diferentes vacunas y antivirales que nos permitan desterrar este coronavirus. El ejemplo del Dr. Vaquero debe cundir en esta búsqueda contrarreloj. Cuando la crisis acabe no debemos parar la rueda de la investigación, debe seguir funcionando. Su voluntad como la de otros muchos médicos es inquebrantable, pero necesitan apoyo. Este Gobierno y los que vengan y todas las administraciones públicas deben ponerse al lado del investigador, empujar al sistema de ciencia y comprender que la investigación es el único camino para superar esta pandemia y recuperar nuestra economía de la parálisis.
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