La llegada de la receta electrónica revoluciona las prescripciones privadas

El Real Decreto 1718/2010 de 17 de diciembre 2010 sobre Receta Médica introduce definitivamente las tecnologías de la información en el sistema sanitario, para médicos, administraciones públicas, farmacias y pacientes. Regula la receta médica privada y la pone prácticamente al mismo nivel que la receta del sector público.

La receta electrónica es un procedimiento tecnológico que permite la prescripción de los medicamentos de manera automatizada. Obliga a un control de las prescripciones y tiene como objetivo garantizar la retirada de los medicamentos por parte de los pacientes desde cualquier farmacia sin necesidad de presentar una receta en papel.

La receta mecanizada actual generada informáticamente que ya existe en los centros de salud permite prescribir con más ayudas, menos margen de error y mayor calidad, pero sigue exigiendo la presencia del papel. El siguiente paso es la receta electrónica en la que ya no se necesita el papel, solo con la tarjeta sanitaria en el caso de la sanidad pública o con el DNI en el caso de la sanidad privada, se pueden recoger los medicamentos prescritos por el médico.

La legislación de la receta electrónica privada sí aporta cambios significativos, y de hecho la pone casi al mismo nivel que la receta pública. La anterior receta privada en un papel con membrete no daba seguridad, permitía todo tipo de fraudes y no tenía ningún tipo de seguridad legal. Este sistema arcaico cambia y hace que los habituales problemas con las falsificaciones tiendan a desaparecer. Cada receta tiene un sistema trazable que permite saber exactamente qué medico expidió la receta, etc.

Las principales diferencias se encuentran en:

•    Un solo medicamento por receta
•    Hoja de instrucciones obligatoria para el paciente
•    Datos mínimos obligatorios
•    Obliga a adoptar medidas de control y anti-fraude

Ventajas para el médico

•    Favorece las medidas de seguridad anti-fraude
•    Favorece la prescripción por ordenador con todas sus ventajas (interacciones entre medicamentos, dosificaciones incorrectas…)
•    Reduce las colas de enfermos crónicos solicitando continuamente la misma receta

Y también tiene repercusiones para el paciente

•    Información de la prescripción más completa y en su poder (hoja de instrucciones al paciente)
•    Se evitan errores en la interpretación de la prescripción manuscrita del médico
•    Acceso desde todas las farmacias a su receta
•    Evita la continua visita al médico para la misma receta

La forma de uso de la receta electrónica es la siguiente:

El paciente se identifica con su tarjeta sanitaria y el médico se identifica y acredita electrónicamente.

1.    La prescripción se realiza contra un Nomenclátor (el oficial del SNS o una adaptación del mismo)
2.    La prescripción médica se registra automáticamente en la historia clínica electrónica del paciente
3.    Las recetas se generan de forma electrónica, y se validan automáticamente con la firma electrónica del facultativo, almacenándose en una Base de Datos de prescripción.
4.    El médico imprime el volante de instrucciones del paciente, en soporte papel
5.    La oficina de farmacia realiza la identificación automática del paciente y sus datos a través de la tarjeta sanitaria, y accede a una o varias prescripciones pendientes de dispensar.
6.    Se registra automáticamente la dispensación de la oficina de farmacia a través de la firma electrónica del farmacéutico, así como las sustituciones, si fueran realizadas.

Las plataformas son delicadas por la seguridad y por las herramientas médicas que llevan incorporadas. Este tipo de herramientas ayudan mucho al médico en el momento de la prescripción.

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