El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha desarrollado junto con científicos de la Universidad de Sevilla un pan de trigo apto para las personas celíacas y con demás tipos de intolerancia al gluten.
Este nuevo tipo de pan se ha desarrollado a través de harinas de trigo con un nivel muy bajo de las glucoproteínas del gluten denominadas gliadinas, que han sido tratadas mediante modificación genética. Los científicos han indicado que “pese a que la modificación de estas variedades de trigo supone una reducción de sus proteínas, sus propiedades nutritivas son similares a las del trigo común”.
Estas versiones transgénicas compensan el déficit de gliadinas y aumentan su contenido en otras proteínas presentes en el grano, no relacionadas con la celiaquía, y rica en lisina, “un aminoácido esencial para los humanos y que ha de incluirse en la diera, ya que el organismo no lo genera de forma natural”.
Además, ha sido elaborado “de la forma más natural posible y con levadura especial para celíacos”, y ha sido comparado con el pan de harina de trigo normal y también con el pan de arroz. Los resultados han indicado que este nuevo tipo de pan con menor nivel de gliadinas presentaba características similares de calidad harinopanadera, teniendo en cuenta las propiedades organoelépticas, nutricionales e inmunotóxicas.
La enfermedad celíaca y demás patologías relacionadas con la intolerancia al gluten han aumentado en los últimos años en torno a un 7% a nivel mundial, y en España alrededor de medio millón de personas padece algún trastorno autoinmune a causa del trigo, la cebada o el centeno.
Por otro lado, el coste del producto puede ser casi similar al del pan normal, algo que supondría un gran ahorro a las familias con al menos un miembro celíaco, ya que el coste basado en una dieta de entre 2.000 y 3.000 calorías se encarecía en 1.616 euros al año, según un informe de la Federación de Asociaciones de Celíacos en España (FACE).
Se calcula que este nuevo tipo de pan será probado con personas celiacas a lo largo de este año y parte del 2015, para lo que se necesitará de entre 500 y 800 kilos de harina y alrededor de 70 u 80 personas voluntarias para dicho ensayo. Una vez aprobado se podrá comercializar para aquellas personas con problemas de celiaquismo, quienes podrán contar por primera vez con un acceso más asequible a este producto, que además según los científicos catadores “estaba rico”.
La investigación apunta que el trigo se cultiva fácilmente en España, y tan solo se encuentra a esperas de cerrar los aspectos sobre financiación. Los investigadores afirman que ha llamado más la atención en EEUU que en Europa por la polémica que existe sobre los cultivos trasgénicos. Además añaden que “nuestros resultados ofrecen una gran oportunidad para mejorar la calidad de vida de millones de personas en todo el mundo que sufren alguna intolerancia al gluten”.
..Débora Rey
