La mosca tsé-tsé, causante de la enfermedad del sueño, podría ser su cura, y es que esta información que sale a la luz en el artículo ‘Genome sequence of the tsetse fly’ publicado por la revista Science, reaviva la esperanza de eliminar la tripanosomiasis humana africana como un problema de salud pública en las zonas del África subsahariana, donde la enfermedad es endémica.
El artículo explica cómo científicos de todo el mundo en estudios recientes están investigando un genoma de la mosca tsé-tsé que elimina los parásitos que causan la tripanosomiasis africana humana. Este estudio abre nuevas puertas para la cura de esta enfermedad mortal diseñando estrategias de prevención para reducir el número de muertes y enfermedades asociadas con la tripanosomiasis humana africana y otras patologías transmitidas por la mosca tsé-tsé.
Estos insectos, cuya alimentación es exclusivamente de sangre y dan a sus crías una mezcla de proteínas que es similar a la leche de los mamíferos, podrían ser ellos mismos quienes frenaran la propia enfermedad que originan. Los análisis de proteínas realizados en la leche tsé-tsé revelan importantes similitudes con los encontrados en la leche de los mamíferos, un hecho que pone de manifiesto como la lactancia en un aspecto definitorio de la biología de los mamíferos y como según los autores del estudio la investigación de estos insectos permitirá que se descubran nuevos datos de otras especies.
También han descubierto el gen fotorreceptor RH5, el eslabón perdido que explica la atracción que la mosca tsé-tsé tiene hacia los colores azul y negro, comportamiento que ha sido muy explotado para desarrollar trampas que redujeran la prevención de esta enfermedad.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), las iniciativas sostenidas de control de la enfermedad, desde 2009 han reducido el número de casos por debajo de los 10.000, lo que no había ocurrido en 50 años. Muchos son los estigmas que durante años ha acompañado a esta enfermedad, especialmente la detección y su tratamiento, y es que como afirma uno de los autores del estudio, el investigador Serap Aksoy, “es caro, difícil y peligroso”, además, la prevención de la enfermedad mediante el desarrollo de vacunas no parece una medida fácil de aplicar debido a la capacidad de los tripanosomas para evadir el sistema inmune de los mamíferos.
La información que se está obteniendo en el genoma de la mosca tsé-tsé, además del control de la enfermedad, según Askoy aporta a la biología un recurso de gran valor, y es que el acceso a esta información acelerará la investigación sobre la biología básica de la mosca tsé-tsé. Los resultados se aplicarán al mejor aprovechamiento de los métodos de control actuales de la mosca tsé-tsé y al desarrollo de nuevas estrategias que redunden en la mejora de la eficacia y reducción de costes.
..Emilio Ramirez
