Dos estudios internacionales y multicéntricos que se publican hoy en Nature desvelan nuevos genes asociados al trastorno del espectro autista (TEA), proporcionando nuevas claves de los factores etiológicos de esta patología del neurodesarrollo. Ambos trabajos se han valido de la secuenciación del exoma y constituyen dos de las investigaciones más amplias con esta metodología en individuos con autismo. Los autores de uno de los trabajos, cuyo investigador principal es Joseph Buxbaum, del Centro Seaver para la Investigación y el Tratamiento del Autismo, en Nueva York, explican la trascendencia de esta línea de investigación: “Uno de los rasgos de los individuos con TEA es la dificultad de comunicación e interacción social. Dado que la mayor parte del riesgo se debe a variaciones genéticas de novo y heredadas, caracterizar qué genes están implicados informa sobre la neurobiología del TEA y revela parte de lo que nos convierte en seres sociales”. (Diario Médico)