La primavera se convierte, año tras año, en una de las épocas más duras para las personas que sufren alergia al polen, polinosis o fiebre del heno. Según el presidente del Comité de Aerobiología de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología clínica (Seaic), este año los ocho millones de alérgicos al polen se enfrentan a una primavera de intensidad moderada, con una concentración por metro cúbico de aire de unos 5.300 granos de polen. La especialista de la Unidad de Alergias del Hospital Mesa del Castillo, Muna Boulaich, ha subrayado que la predicción se realiza teniendo en cuenta las precipitaciones del otoño-invierno (relación directa con recuento de polen de gramíneas en primavera) y factores climáticos como la temperatura y humedad. Asimismo, ha recomendado el uso de algunas de las aplicaciones móviles que informan sobre el tipo de polen y su concentración ambiental en las distintas zonas geográficas. Se representa mediante unas gráficas con picos que indican máximos de determinados granos polínicos asociados a los diferentes meses del año y zonas geográficas. (Redacción Médica)