El Gobierno de Corea del Sur informó este pasado sábado 4 de julio de que un médico se ha contagiado del Síndrome Respiratorio por coronavirus de Oriente Próximo (MERS-CoV), lo que eleva el número de personas afectadas por el brote a 185.
El médico que, había dado positivo ese día, y cuyo nombre no ha sido desvelado, trabajaba en el hospital Samsung de Seúl, centro que permanece cerrado de forma indefinida, y donde se ha registrado la mitad de los contagios de este virus que ha costado la vida a 33 personas en Corea del Sur desde que se detectase el brote el pasado 20 de mayo.
El día anterior (3 de julio) una enfermera del mismo centro fue también diagnostica con el MERS-CoV, lo que sitúa ya en 13 el número de empleados de este recinto sanitario que se han contagiado, según informó la agencia local Yonhap.
El Ministerio de Salud y Bienestar de Corea del Sur, no obstante, se muestra optimista, ya que desde el pasado 30 de junio no se había registrado ninguna muerte por el virus, y el número de contagios ha ido descendiendo, lo que indica que el brote, en cierta medida está bajo control.
De las 185 personas a las que se les ha diagnosticado la enfermedad en el país asiático, 111 se han recuperado plenamente y 41 permanecen hospitalizadas, según datos del Ministerio de Salud y Bienestar surcoreano.
De momento hay unas 2.451 personas que permanecen en cuarentena, la mayoría en sus casas para evitar más infecciones, al haber tenido contacto directo con pacientes portadores del virus. Desde la primera detección del brote a finales de mayo, unas 16.000 personas han tenido que pasar por cuarentena en Corea del Sur, y unos 90 hospitales del país asiático se han visto afectados por el Síndrome Respiratorio por coronavirus de Oriente Próximo.
Con esta muerte, la tasa de mortalidad de esta enfermedad respiratoria que de momento no tiene vacuna ni cura conocida se sitúa en el 18% en Corea del Sur, país en el que está causando una gran alarma social, ya que se ha convertido en el segundo país con mayor número de contagios después de Arabia Saudí, nación donde se detectó por primera vez este síndrome en 2012.
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