Un equipo de investigadores de la División Médica de la Universidad de Texas (UTMB) en Galveston, y de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, han desarrollado una vacuna inhalable que protege a los primates contra el virus del ébola, según informa un artículo sobre su trabajo publicado en Journal of Clinical Investigation.
La vacuna que, se administra en aerosol para inhalar por la nariz, ha demostrado su eficacia para proteger a primates no humanos contra el ébola.
Estudios recientes habían demostrado que el contacto con el virus del ébola a través de las membranas mucosas que recubren las vías respiratorias provoca infección, lo que sugería que los revestimientos de las vías respiratorias pueden ser portales importantes de entrada para el virus.
“Una vacuna contra el ébola sin aguja e inhalable presenta ciertas ventajas”, explica la estudiante de postdoctorado en el Departamento de Patología de la UTMB, Michelle Meyer, quien agrega que “este tipo de inmunización no requerirá de personal con conocimientos médicos para su administración”.
Hasta ahora nunca antes se había probado una vacuna contra el ébola ni contra la fiebre hemorrágica viral administrada mediante aerosol. En el trabajo ha participado el inmunólogo de la Universidad de Boston Gene Olinger, uno de los pocos científicos en el mundo que está acostumbrado a manejar las cepas más letales del ébola.
El estudio se centró en las respuestas inmunes generadas por la vacunación contra el ébola suministrada al tracto respiratorio como un aerosol o un líquido. Una sola vacunación con el aerosol desarrollado “protegió a primates no humanos contra la enfermedad grave y la muerte causada por la infección letal de ébola”, informa la UTMB en un comunicado.
“Este estudio demuestra por primera vez el éxito de la vacunación en aerosol contra la fiebre hemorrágica viral”, afirma el virólogo de la UTMB, Alex Bukreyev, y autor principal del trabajo, quien concluye que una dosis única de la vacuna en aerosol “permitiría tanto la prevención como la contención de infecciones por ébola en un entorno natural del brote donde la infraestructura sanitaria es deficiente o durante el bioterrorismo y los escenarios de guerra biológica”.
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