Los implantes subretinales pueden restaurar la visión de pacientes con retinitis pigmentosa

De acuerdo a los resultados de una nueva investigación, después de que un grupo de pacientes ciegos por retinitis pigmentaria se sometiera a la implantación de un dispositivo transcoroidal subretiniano (Alpha IMS, Retina Implant AG), casi el 50% de ellos pudo reconocer formas y detalles de objetos, y otro 25% pudo localizarlos, doce meses después de la intervención.

Estos pacientes eran completamente ciegos antes de la implantación, y ahora más de la mitad de ellos se están beneficiando del procedimiento en su vida diaria“, dijo Helmut Sachs, Doctor en Medicina de la Städtisches Klinikum Dresden-Friedrichstadt en Alemania.

Pruebas anteriores han demostrado que la mayoría de los pacientes tenían alguna percepción de la luz después de la implantación del dispositivo, y algunos tenían una percepción básica del movimiento, según lo informado.

El Dr. Sachs presentó los resultados visuales y quirúrgicos observados en 29 pacientes ciegos que recibieron el implante en la Reunión Anual de la Academia Americana de Oftalmología de 2015.

La única prótesis de retina que está aprobada actualmente por la Food and Drug Administration (FDA) es el implante epirretinal Argus II de Second Sight, que requiere que los pacientes lleven una cámara.

Por el contrario, el dispositivo subretiniano es interno y no requiere ninguna cámara. Se trata de un microchip que consta de electrodos, fotodiodos y un amplificador, que se implanta en la zona subfoveal. También se coloca un transmisor magnético cerca de la oreja.

Cada uno de los 1500 fotodiodos que contiene emite una corriente eléctrica que estimula a las células ganglionares, y cada uno controla un amplificador que emite corrientes para estimular las células bipolares suprayacentes. Una bobina retroauricular subcutánea se encarga de proporcionar las indicaciones de fuerza y ​​de control. Un cable subcutáneo conecta la bobina a la zona subretiniana. El paciente en este caso puede ajustar el dispositivo para cambiar el brillo y el contraste.

La retina del paciente ciego por retinitis pigmentosa no es sensible a la luz porque el fotorreceptor ya no está” comentó el Dr. Sachs. “Sustituimos el potencial perdido del fotorreceptor por esta corriente eléctrica“.

Resultados tras doce meses
El 44,8% de los pacientes (13 de los 29) lograron un reconocimiento de objetos en términos de formas y detalles, una de las principales variables de evaluación. Ocho pacientes (el 27,6%), lograron localizar los objetos (la otra variable principal) y los ocho restantes no tuvieron respuesta. “No sabemos por qué algunos pacientes no tienen respuesta”, dijo el Dr. Sachs. “La retinitis pigmentosa no es una sola entidad. Hay una gran cantidad de tipos diferentes, y esto podría ser un problema genético“.

En el 45% de los pacientes se observó una restauración de la función visual que era útil en la vida diaria. Las agudezas visuales de los pacientes que completaron con éxito el test de los anillos de Landolt C., fueron 20/200, 20/546 y 20/606.

En los casos más exitosos, los pacientes fueron capaces de leer los titulares en un periódico. “Aproximadamente una cuarta parte de los pacientes alcanzaron ese nivel de visión”, informó el Dr. Sachs.

La prueba visual y la percepción subjetiva de los resultados muestran la restauración de la visión útil en la mayoría de los pacientes“, comentaron el Dr. Sachs y sus colegas. “Estos resultados muestran que los implantes subretinianos pueden restaurar una baja o muy baja visión en pacientes ciegos“.

El próximo objetivo para los desarrolladores es hacer que el implante sea más “bioestable“. “Con el tiempo, se observa una disminución de la función, en gran parte porque el chip es atacado por un ambiente hostil”, dijo el Dr. Sachs. Sí apuntó que los implantes de nueva generación van a durar de 5 a 10 años más.

El Dr. Sachs destacó que la principal ventaja de este implante frente al implante epirretinal aprobado por la FDA es el logro de una “visión más fisiológica“, lo que significa que hay mayor conexión entre la dirección a la que se está mirando y lo que uno ve.

Tú miras donde está el objeto, y lo que ves es lo que hay“, dijo. El implante no requiere que los pacientes usen una cámara. “Nuestros pacientes nos dicen que no quieren parecer raros“.
No hubo complicaciones en la intervención quirúrgica, ni otros problemas de seguridad.

Siempre ha existido un gran interés por las prótesis de retina, y éste es un gran diseño”, dijo Emmanuel Chang, Doctor en Medicina del centro Retina and Vitreous of Texas, en Houston. “Comparado con el Argus II, es un electrodo más pequeño y tiene una resolución más alta“, pero comentó que estos dispositivos son todavía demasiado grandes. “Todos ellos tienen una base electrónica que limita su tamaño y su estructura“, dijo.
..Susana Calvo

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