En este año 2015 dejado atrás, el Hospital Materno Infantil La Paz ha estado de enhorabuena por varios motivos, y es que además de celebrar sus 50 años como una de las primeras maternidades de España, con casi 700.000 nacimientos, 400.000 intervenciones, 6,2 millones de consultas o 1,4 millones de urgencias; el 2015 ha sido un año bueno en cuanto a materia de donaciones para trasplantes intestinales en niños, con 10 intervenciones realizadas, cifra que supone alcanzar otra vez la cifra máxima anual en este tipo de trasplantes en pacientes infantiles.
“Ha sido un año bueno en donaciones, ya que hemos alcanzado nuestro máximo histórico, junto con otro par de años. Llevamos 10 trasplantes, que es nuestro punto máximo”, afirma el jefe de Rehabilitación Intestinal del hospital, Gerardo Prieto.
Por segundo año consecutivo, La Paz ha tenido “el programa más activo en Europa en trasplante de intestino”, indica el jefe de Cirugía Pediátrica del hospital, Manuel López Santamaría que, añade también que “en volumen de actividad, es el tercer hospital de Europa”.
El hospital con más experiencia en fracaso intestinal
Para el doctor López “muy pronto seremos el hospital en Europa con más experiencia en trasplante intestinal y con más experiencia en fracaso intestinal en niños”. Pese a ello, en 2015, fallecieron en lista de espera de un trasplante multivisceral dos niños, lo que hace que sea “eso lo más triste, que niños fallezcan sin haberles podido trasplantar”, prosigue el doctor.
Paralelamente, en este año hubo bastantes casos en los que se lograron que los niños quedaran autónomos y pudieran alimentarse por vía digestiva, sin necesidad de trasplante, según el doctor Prieto.
El fracaso intestinal en los niños es “una de las enfermedades más graves que se pueden sufrir porque no solo afecta al intestino, sino que el intestino va tirando de todos los demás órganos, y al final es un fracaso de muchos órganos”, explican.
Es una enfermedad crónica grave que, hace que el niño esté ingresado o en tratamiento durante un tiempo muy prolongado, exigiendo además que sus padres no puedan trabajar y llevar una vida normal, tal y como señala la Asociación española NUPA dedicada a niños con trasplante multivisceral y afectados de fallo intestinal y nutrición parenteral.
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