Estos días está compareciendo ante la justicia francesa Jacobus Van Nierop, el holandés conocido como el “dentista del horror”, tras ser acusado de haber mutilado las bocas de un centenar de pacientes entre los años 2008 y 2012.
Van Nierop emigro de Holanda y se estableció en Château-Chinon, localidad en la que provocó grandes daños, como infecciones y problemas en la mandíbula, a sus pacientes. En una sesión llegó a arrancar hasta ocho dientes en una sesión o a facturar diecinueve actos médicos a la Seguridad Social por una sesión de tan solo diez minutos.
El odontólogo de 51 años está siendo procesado por el tribunal correccional de Nevers, en Francia, y ya en su primera declaración afirmó que, tras la muerte de su esposa, la gente «no le interesaba» y admitió su responsabilidad en los hechos.
A pesar de ello, el dentista aseguró que no recuerda muchos de los más de cien casos por los que ha sido imputado, entre los que se incluyen mutilaciones, violencia sobre personas vulnerables o estafa, entre otros. En el juicio, la fiscalía denunció que varias de las víctimas del «dentista del horror» todavía están padeciendo las secuelas.
En un primer momento el holandés fue muy querido por los vecinos de la localidad medios franceses, pero pronto empezó a ser conocido por sus actos. Finalmente, en 2011 el Colegio de Dentistas quirúrgicos presentó una queja contra el hombre por prácticas ilegales, proceso al que también se sumó la Seguridad Social tras al detectar irregularidades en la facturación de sus consultas.
Tras haber sido extraditado a Holanda desde su escondite en Canadá donde huyó al haber estallado la polémica, fue enviado de nuevo a Francia, donde permanece detenido, se enfrenta a una sentencia de hasta diez años de prisión. El veredicto se conocerá a partir del próximo 18 de marzo.
..Susana Calvo
