Publicado en Diario Médico Una investigación del Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona) en colaboración con hospitales españoles y la Universidad Rovira i Virgili, de Tarragona, ha puesto al descubierto una dependencia del cáncer de mama que podría abrir nuevas opciones terapéuticas para combatirlo. Los científicos describen en Nature Communications que las células de mama tumorales necesitan recoger grasas del exterior y trasladarlas a su interior para poder seguir proliferando. La principal proteína en este proceso es LIPG, una enzima localizada en la membrana celular sin cuya actividad la célula tumoral no puede crecer. Los análisis de más de 500 muestras clínicas de pacientes con distintos tipos de tumores de mama revelan que el 85 por ciento tienen altos niveles de LIPG. En España, el cáncer de mama es el tumor más frecuente en mujeres, con más de 25.000 nuevos diagnósticos cada año. Según cifras de la Organización Mundial de la Salud, en el mundo se diagnostican 1,38 millones de nuevos casos y produce 458.000 muertes al año.