La warfarina, utilizada para la fibrilación auricular, aumenta el riesgo de demencia

La fibrilación auricular es una enfermedad relativamente común y, a causa del envejecimiento de la población, se está volviendo aún más común. Este aumento se refleja en el uso elevado del fármaco anticoagulante warfarina. Este fármaco ha salvado muchas vidas, pero una nueva investigación muestra un peligro oculto: el aumento del riesgo de demencia en pacientes con fibrilación auricular.

La warfarina se ha utilizado para prevenir los coágulos sanguíneos potencialmente mortales durante más de medio siglo; un estimado de 20 millones de americanos toman actualmente el fármaco.

La fibrilación auricular (FA) se refiere a una ritmo cardiaco irregular y anormalmente rápido y puede causar una variedad de síntomas, que incluyen dificultad para respirar, mareos y cansancio. Hay un estimado de 2,7 millones de estadounidenses que viven con FA.

De acuerdo con la Asociación Americana del Corazón, la FA aumenta cinco veces el riesgo de accidente cerebrovascular. Por esta razón, la capacidad de la warfarina para prevenir los coágulos de sangre es un potencial salvador.

Dado que los coágulos de sangre pueden afectar gravemente la función cerebral, la FA es conocida por fomentar el riesgo de desarrollar demencia. Por otro lado, los anticoagulantes utilizados para aliviar los síntomas de la FA aumentan la probabilidad de hemorragias cerebrales que pueden, con el tiempo, tener un impacto negativo sobre la función cerebral.

La warfarina y la demencia
La warfarina se ha utilizado durante muchos años y se prescribe en grandes cantidades en el mundo industrializado. Una nueva investigación, presentada en 37ª Sesión Científica Anual de la Heart Rhythm Society, ha utilizado los datos de más de 10.000 pacientes para investigar los vínculos entre la warfarina, la demencia y la FA.

Cada uno de los participantes del estudio era un usuario a largo plazo de la warfarina. Algunos lo utilizaban el fármaco para la FA y otros para diferentes enfermedades, incluyendo ela enfermedad tromboembólica y la enfermedad cardíaca valvular. Ninguno de ellos tenía antecedentes de demencia.

Después de 7 años, se hizo un seguimiento del grupo. Los investigadores observaron que la demencia es más frecuente en el grupo de FA que el grupo no-FA, un 5,8% en comparación con un 1,6%, respectivamente.

El estudio fue dirigido por el Dr. T. Jared Bunch y un equipo de investigadores del Intermountain Medical Center Heart Institute en Salt Lake City, UT. Ellos mostraron que en las personas que tomaron warfarina para la FA a largo plazo se aumentaron las tasas de demencia vascular y de enfermedad de Alzheimer, en comparación con los usuarios de warfarina con enfermedades distintas a la FA.

El problema de la warfarina
La warfarina es un medicamento notoriamente difícil de administrar en los niveles correctos. Existe una cuerda floja entre los riesgos de coagulación por un lado y de sangrado por otro. Cada paciente responde de manera diferente a la warfarina, y los efectos del fármaco pueden verse afectados por múltiples factores. Además, sus acciones en el cuerpo necesitan tiempo para desarrollarse, por lo que encontrar la dosis correcta puede ser un proceso largo. Estos factores combinados hacen que los niveles de warfarina sean difíciles de manejar.

Una investigación anterior demostró que una peor gestión de la warfarina podría aumentar las probabilidades de desarrollar demencia en pacientes con FA. La investigación actual respalda estos hallazgos anteriores; de hecho, el riesgo aumentó en pacientes cuya dosis fue más difícil de manejar. Sin embargo, también observaron que, independientemente de la calidad de la gestión de la warfarina, los niveles de demencia siguieron aumentando.

En resumen, los investigadores demostraron que tanto si los niveles de warfarina eran demasiado altos o demasiado bajos, o en la dosis correcta, el riesgo de demencia seguía aumentando.

Los resultados de nuestro estudio son los primeros en demostrar que existen importantes factores de riesgo cognitivos en pacientes tratados con warfarina durante un largo período de tiempo, con independencia del indicio de anticoagulación“.

Futuras preocupaciones que rodean a la warfarina
Por una serie de razones, el Dr. Bunch cree que estos resultados son de gran importancia. En primer lugar, es importante conocer los riesgos asociados a un medicamento, especialmente uno que se utiliza con tanta frecuencia. Se recomienda prescribir anticoagulantes sólo a las personas que los necesiten imperiosamente.

En segundo lugar, los resultados sugieren que las personas que toman anticoagulantes deben evitar tomar otros medicamentos que pueden aumentar las posibilidades de sangrado, como la aspirina, a menos que sea del todo necesario. Además, para aquellos que están tomando warfarina, pero cuyos niveles de dosificación son difíciles de manejar, el cambio a fármacos nuevos y más predecibles, podría ser una solución más segura.

Dado el uso generalizado de la warfarina, los resultados de cualquier investigación sobre sus riesgos asociados son propensos a generar debate.
..Susana Calvo

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