El PSOE considera que la sanidad de calidad y universal es una obligación, no una opción

La sanidad de calidad y universal es una obligación, no una opción”. Este el lema del programa socialista, que pretende devolver a la ciudadanía lo que nunca se le debió arrebatar: el derecho a una sanidad pública, universal y de calidad. El PSOE considera que el país necesita una nueva visión, un impulso modernizador que lo adapte a estos nuevos tiempos, por lo que han incluido en su programa electoral decenas de propuestas en materia sanitaria orientadas a este fin:

– Después del debilitamiento del sistema sanitario público a favor de la asistencia y el aseguramiento sanitarios privados, el PSOE apuesta por recuperar el carácter público, universal y de calidad del Sistema Nacional de Salud, estableciendo elementos claros de equidad y solidaridad en las políticas públicas que neutralicen las situaciones de desventajas y lucha contra la desigualdad e inequidad, a través de la redacción de una nueva Ley General de Sanidad.

– Proponen eliminar el copago sanitario para que las personas se preocupen de superar su enfermedad y no de pagar su tratamiento. No admitimos copagos en la salud de una ciudadanía que ya paga la sanidad pública con sus impuestos. Prohibiremos por ley los copagos. Eliminaremos las barreras de acceso al sistema de salud por motivos económicos. Crearán una estrategia de precios del medicamento para garantizar el acceso a los tratamientos necesarios para el paciente.

– Considerarán a la Sanidad como una inversión, no como un gasto. El esfuerzo inversor se hará desde la perspectiva del retorno a la sociedad, con un doble objetivo: de transferencia a la práctica clínica y de transferencia al sector biotecnológico e industrial. Por eso incrementarán el presupuesto destinado a la sanidad pública supone estar para reducir las listas de espera, y reforzarán la gestión pública del sistema: mantendrán la titularidad pública de los hospitales y centros de salud y de los servicios sanitarios y clínicos que se prestan en los mismos, sin perjuicio de que el sector privado pueda desarrollar un rol complementario, sometido a criterios de complementariedad, transparencia, exigencias estrictas de garantías de calidad y control, así como una evaluación pública periódica dando prioridad a entidades privadas sin ánimo de lucro.

El Sistema Nacional de Salud tiene una insuficiente financiación, por ello el PSOE invertirá más en sanidad pública, procurando que la participación en el PIB alcance el 7% del PIB al final de la segunda legislatura. Ejercerá una gestión activa del gasto mejorando los procesos y la calidad del sector y promoverá mecanismos de financiación que se vinculen a la reducción de listas de espera y la mejor calidad del servicio para los pacientes. Además, impulsará un proceso de evaluación independiente para el seguimiento de la calidad a nivel estatal.

– Adaptarán los sistemas de Salud y de Servicios Sociales a las necesidades demográficas, sociales y tecnológicas de este siglo, lo que requiere adoptar enfoques novedosos e innovadores que trascienda al propio sector sanitario. nuevos escenarios económicos y sociales, que evite las desigualdades sociales en salud y proteja al sistema sanitario público. Para ello, es imprescindible que junto a la solidaridad, equidad y universalidad, la calidad y la eficiencia de la nueva ley, se creen medios participativos en atención al desarrollo de la salud comunitaria, que favorezcan un nuevo Sistema basado en la participación ciudadana, la trasparencia de gestión y, la máxima calidad.

– Reorientarán el modelo de atención en salud, no sólo hacia la cronicidad y el envejecimiento, sino hacia el paradigma de la salud positiva, hacia una medicina predictiva y preventiva adaptada a los avances biotecnológicos y de la genómica, además de reforzar el abordaje psicológico y emocional de la atención sanitaria que se presta. Prestarán más atención a las medidas preventivas, de promoción de la salud y la rehabilitación y el tratamiento de pacientes con procesos crónicos han quedado en un segundo plano por detrás de servicios asistenciales, especialmente orientados al tratamiento de procesos agudos, lo que introduce al sistema en una tendencia de aumento de gasto sin que incremente la eficacia.

– Lucharán contra la desigualdad e inequidad en salud: Para salvaguardar la pérdida de calidad de vida de las personas en los períodos de crisis e inestabilidad económica o política., en especial la de los más vulnerables, sus políticas públicas de salud irán encaminadas a promover la igualdad de oportunidades, y a mitigar las desigualdades e inequidad, preservando las necesidades básicas y evitando las situaciones de riesgo y desprotección.

– Velarán por los intereses de los profesionales sanitarios: Invertirán en los profesionales de la Sanidad reforzando la formación continuada; reconociendo la calidad asistencial; fomentando la autonomía de gestión; implantando la evaluación y acreditación periódica y crearán un marco de las políticas de investigación y formación de los profesionales sanitarios que garantice su permanencia en el sistema público a través de la creación de estructuras que retengan el talento. Además elaborarán un plan de recursos humanos con el objetivo de reducir la precariedad y la temporalidad.

– Promoverán una Estrategia de Buen Gobierno y Gestión de las organizaciones del SNS, que contribuya a mejorar la calidad y la eficiencia de los centros, la rendición de cuentas y la transparencia, la participación democrática, la autonomía y profesionalización de la gestión.

– Concebirán la Atención Primaria de Salud como la puerta ordinaria de entrada al sistema sanitario, promoviendo medidas que mejoren el uso de los servicios de urgencia y reforzando también los servicios en la comunidad y domicilio. Impulsar la investigación en la atención primaria con perspectiva de género, especialmente en materias de promoción de la salud, prevención de la enfermedad y discapacidad.

– Crearán un sistema específico de detección, atención e investigación para enfermedades raras y personas con grandes discapacidades, enfermos de cáncer, VIH, hepatitis víricas e Infecciones de Transmisión Sexual, diabéticos, enfermos de Alzheimer, trasplantados, pacientes con Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), personas con algún tipo de intolerancia alimenticia, afectados por la Talidomida y pacientes con trastorno del Espectro Autista (TEA), entre otros.

– Serán responsables y eficientes en la inversión sanitaria. Para ello, pretenden situar en las Cortes Generales el sitio donde definir y monitorizar este paquete de reformas y este proyecto estratégico común para los próximos años. Desarrollar una política de eficiencia en el gasto farmacéutico incorporando diferentes procedimientos, entre ellos, el sistema de selección pública para medicamentos y productos sanitarios sin patente; la actualización continua del precio de referencia; y el impulso de los medicamentos genéricos.

– Acelerarán la revolución digital y tecnológica en la Sanidad, con un Plan estratégico, con el fin de mejorar la calidad de cuidados, facilitar el acceso a sistemas de apoyo a la decisión clínica a los profesionales, promover la utilización a escala de avances tecnológicos como los tele-cuidados y la tele-monitorización y extender la prescripción electrónica interoperable en todo el territorio nacional.

– Promoverán la responsabilidad con el medio ambiente en la Sanidad, impulsando en el SNS un Plan de Salud y Medio Ambiente, con especial atención en el ahorro del agua, la gestión de residuos y la eficiencia energética en los centros sanitarios y desarrollar el proyecto “El hospital verde”, para disminuir la emisión de CO2, y mejorar la gestión de los residuos.

– Promoverán que las empresas privadas sean socialmente responsables participando en proyectos sociales.

..Susana Calvo

Opinión

Multimedia

Especiales

Atención primaria

Sanidad privada

iSanidadental

Anuario

Accede a iSanidad

Síguenos en