Publicado en El Día La llamada “marea blanca” ha salido a la calle, una vez más, en defensa de la sanidad pública y ayer se centró en el cierre de 3.000 camas en la sanidad pública madrileña durante este verano, según informó un portavoz del colectivo a Europa Press. Bajo el lema “Gobierne quien gobierne, la sanidad pública se defiende”, alrededor de cien personas se concentraron ayer a las puertas del Ministerio de Sanidad, donde criticaron las “privatizaciones, externalizaciones y derivaciones” en la sanidad pública madrileña. Una de las principales razones de la concentración fue la noticia sobre el cierre de 3.000 camas hospitalarias este verano, que, en opinión de Jesús Escudero, uno de los portavoces de la marea, “significará un colapso en urgencias y problemas para ingresar a los pacientes”.