Un nuevo estudio sugiere que el ácido docosahexaenoico – un tipo de ácido graso omega-3 presente en el aceite de pescado y los suplementos dietéticos – tiene el potencial de prevenir el lupus, después de observar que el ácido graso bloqueó un desencadenante conocido de la enfermedad.
En la revista PLoS ONE, los investigadores informan de cómo el ácido docosahexaenoico (DHA) evitó que la sílice cristalina – un mineral tóxico asociado con el desarrollo del lupus eritematoso sistémico (LES) – causara lesiones pulmonares en ratones genéticamente predispuestos al lupus.
El lupus es una enfermedad autoinmune que afecta a alrededor de 1,5 millones de personas en Estados Unidos.
En el lupus, el sistema inmune ataca por error y destruye los tejidos sanos, las células y órganos, causando dolor e inflamación.
El LES es la forma más común de la enfermedad y representa alrededor del 70 por ciento de todos los casos. La piel es el órgano más frecuentemente afectado por el LES, aunque el cerebro, los riñones, los pulmones y otros órganos y tejidos también pueden ser dañados.
La sílice cristalina y el lupus
Hay una serie de factores ambientales que se cree que desencadenan el lupus en individuos vulnerables a la enfermedad, uno de los cuales es la exposición a la sílice cristalina.
La sílice cristalina es un compuesto natural presente en numerosas sustancias, incluyendo el hormigón, ladrillo y mortero. Fue clasificado como un carcinógeno, después de que estudios mostraron que la exposición a pequeñas partículas del compuesto suspendidas en el aire aumenta el riesgo de cáncer de pulmón.
Investigaciones anteriores también han asociado la exposición ocupacional a la sílice cristalina con un mayor riesgo de LES y otras enfermedades autoinmunes, y en particular, al daño a los pulmones.
“Las células en el pulmón pueden engullir la sílice, pero es tan tóxica, que destruye estas células“, explica el coautor del estudio, Jack Harkema, del Instituto de Toxicología Integrativa de la Universidad del Estado de Michigan.
“Cuando mueren, se envían señales al sistema inmune de que algo está mal. Entonces, el cuerpo produce una respuesta tan fuerte que también comienza a dirigirse a las células sanas“.
El DHA impidió un 96 por ciento de las lesiones pulmonares en ratones expuestos a la sílice
Harkema y sus colegas se propusieron investigar si el DHA podría ofrecer cierta protección contra los efectos tóxicos de la sílice cristalina, basándose en el conocimiento de que el ácido graso omega-3 tiene propiedades anti-inflamatorias.
El DHA es una de las tres formas principales de ácidos grasos omega-3. Presente en los suplementos dietéticos y los pescados grasos – como el salmón, el atún y la trucha – el DHA se considera clave para el desarrollo y funcionalidad cerebral.
Para su estudio, los investigadores utilizaron ratones hembras que fueron genéticamente predispuestas a desarrollar lupus.
Se asignó a los ratones aleatoriamente una de cuatro dietas: una dieta que contenía un 0,4 por ciento de DHA, un 1,2 por ciento, un 2,4 por ciento, o una dieta de control. Las dietas de DHA eran equivalentes a las dietas humanas que contienen 2, 6, o 12 gramos de DHA al día.
Después de 2 semanas, todos los grupos fueron expuestos a 1 miligramo de sílice cristalina una vez por semana durante 4 semanas.
Al evaluar los pulmones de los roedores, los investigadores observaron que los ratones que fueron alimentados con las dietas con 1,2 por ciento, o 2,4 por ciento de DHA tuvieron significativamente menos lesiones pulmonares que los ratones que recibieron la dieta de control.
“El noventa y seis por ciento de las lesiones pulmonares se detuvo con el DHA después de haber sido desencadenadas por la sílice“, señala Harkema. “Nunca he visto antes una respuesta protectora tan drástica en el pulmón“.
La dieta del 0,4 por ciento pareció no tener ningún efecto sobre las lesiones pulmonares, informó el equipo.
‘Indicación clara’ de que el DHA puede prevenir el lupus inducido por la sílice
Los investigadores no son capaces de determinar con precisión cómo el DHA podría prevenir las lesiones inducidas por la sílice cristalina, pero se especula que el ácido graso podría estar alterando la forma en que los macrófagos de las vías pulmonares – un tipo de glóbulo blanco que participa en la detección y destrucción de patógenos nocivos – reaccionan ante la sustancia tóxica.
“Nuestro próximo paso es averiguar exactamente lo que está pasando“, dice Harkema.
Aún así, los investigadores afirman que los hallazgos actuales arrojan algo de luz sobre las formas de prevenir el lupus.
“Lo que sí sabemos es que este estudio es una clara indicación de que el consumo de DHA puede evitar este tipo de activación ambiental del lupus. Puede suprimir muchas de las vías de señalización de la enfermedad que los fármacos actuales tratan de atacar y tratar“, dijo el coautor del estudio James Pestka, de la Universidad del Estado de Michigan.
..Susana Calvo
