Publicado en Diario Médico El I Congreso Nacional de la Asociación Española contra la Muerte Súbita (AEMS), organizado en el Colegio de Médicos de Valencia en colaboración con el Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia y la Fundación QUAES, ha puesto de manifiesto que el estudio genético forma parte ya de las herramientas de diagnóstico clínico habituales en este campo, posibilitado en conjunto que ya se detecten las causas de la mitad de los fallecimentos por muerte súbita familiar. Según Ramón Brugada, del Servicio de Cardiología Hospital Josep Trueta y director del Centro de Genética Cardiovascular de l’Institut d’Investigació Biomèdica de Girona (Idibgi), “ya está en las guías clínicas como una herramienta imprescindible y, por tanto, forma parte de cualquier caso de estudio de muerte súbita de causa inexplicada o de sospecha familiar como una prueba más (ECO, electrocardiograma, exploración física…)”. El especialista ha hecho hincapié en que la genética debe ayudar siempre dentro del contexto clínico: “No es para todo el mundo, es para cuando un médico ha decidido que, después de hacer todas las pruebas clínicas que tenía en su mano y que consideraba necesarias, le puede complementar, nunca sustituir, la evaluacion clínica”.