La presentación de una moción para regular un baremo de indemnización de daños sobrevenidos por la actividad sanitaria fue presentada por el Partido Popular. El Dr.Jesús Aguirre, senador del Partido Popular y portavoz de la comisión de Sanidad en Senado explica a iSanidad. Lo mejor de la Sanidad las claves del proyecto.
¿Por qué un Baremo Sanitario defiende al profesional y al paciente y, además, es necesario según el Partido Popular?
Es necesario, tal como apuntamos en la disposición de la ley específica de accidentes de circulación, la cual se viene aplicando por analogía y falta de un baremo específico.
Con criterios únicos y específicos sanitarios habrá un descenso de la litigiosidad y mayor rapidez en la solución de problemas, beneficiando a los profesionales sanitarios y a los pacientes y a su vez animará a las compañías del sector de Responsabilidad Civil a poder hacer la previsión de riesgo de forma mucho más clara.
¿Cuál es el objetivo del Baremo Sanitario: indemnización al paciente frente a un daño o demostrar y delimitar la responsabilidad del profesional?, ¿qué contribuye más a la seguridad jurídica?
Ser justo y ecuánime, y a diferencia de los accidentes de tráfico, el personal sanitario no es el agente generador del riesgo, ya que interviene a requerimiento de los pacientes.
La seguridad jurídica según baremo específico evitarán prácticas de medicina defensiva que es cara y mala, tanto para el médico como para los pacientes.
¿Quién debe intervenir en la creación de las tablas de indemnización y quién debe decidir los valores finales? Será difícil poner de acuerdo a pacientes, profesionales e instituciones
Tendrán que salir de un grupo de expertos a propuesta del Gobierno. Mucha es la experiencia de las administraciones sanitarias, colegios profesionales y empresas que operan en el sector de estos complicados seguros.
Igual que con el baremo específico de circulación, se llegará a puntos de consenso.
Una importante Escuela de Negocios acaba de asegurar que el sistema sanitario necesitará doblar el gasto público sanitario en ocho años. Si es así, ¿será sostenible el SNS que conocemos ahora?
En el estudio presentado por ESADE se ve la necesidad de apostar por una sanidad de calidad y los costes que supondría de cara al futuro.
De 1995 2003 casi se dobla en España (en ocho años), y de 2002 a 2009 se dobla el gasto sanitario.
Si como se espera se sale de la crisis con energía y dinamismo en nuestra economía, este año ya han aumentado los presupuestos sanitarios de las Comunidades Autónomas por primera vez en cinco años, se podrá aportar a la sanidad lo suficiente para mantenerla, acrecentar nuestro rangos de calidad y, por supuesto, mejorar la gestión, optimizar los recursos y evitar los pozos de ineficiencia, cuestiones que se dan muchas veces por estar la sanidad demasiado politizada.
Un gran pacto por nuestra sanidad la haría más sostenible.
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