Publicado en Levante EMV Un jefe de Urgencias del Hospital Clínico Universitario de Valencia, acusado de sacar para su tío 14 cajas de viagra del centro sanitario valoradas en 7.000 euros, cinco de ellas cuando su familiar ya había fallecido, ha defendido que se trata de un “error administrativo” y ha negado que su intención fuese defraudar o estafar a nadie. “Fue una confusión”, ha apostillado. “Cometí un error administrativo subsanable, pero el diagnóstico existía y la prescripción era factible”, ha alegado ante un Jurado Popular el acusado, quien admite que fue él la única persona que prescribió el medicamento Revatio a su tío, que padecía “una hipertensión pulmonar secundaria”. Una vez fallecido este familiar, el procesado siguió sacando cajas del citado fármaco, que también tiene como aplicación terapeútica el tratamiento de la disfunción erectil, con la tarjeta sanitaria de su tío, pero según él, para su padre, también enfermo con la misma dolencia.