Situación dramática a la que se enfrentra la Organización Mundial de la Salud (OMS) para continuar con su trabajo más urgente en Somalia, donde más de 3,3 millones de personas se encuentran al borde de una hambruna, y es que sus actividades destinadas a salvar vidas, carecen prácticamente de financiación.
Sí de por sí la hambruna comienza a ser más que incipiente en el país, la OMS trata de aliviar los efectos de la grave sequía que por tercer año consecutivo está abatiendo Somalia, donde además un conflicto interno obstaculiza el acceso de la población a los alimentos.
“La sequía ha empujado todavía más al país a la hambruna, la enfermedad y la inseguridad sanitaria. Si esta situación continúa la hambruna será una realidad”, advierte la OMS. La hambruna que afectó Somalia en 2011 costó la vida a un cuarto de millón de personas.
La peor epidemia de cólera en los últimos cinco años
Cuando el hambre en un país de escasos recursos aparece, las enfermedades van de la mano, y es que la falta de nutrientes deteriora la salud de las personas y por ende estas son más susceptibles a contraer infecciones, riesgo que se acrecienta porque la sequía también ha provocado que el agua potable para el consumo sea escasa.
Hambruna, sequía, conflictos internos que, en términos sanitarios, la primera consecuencia sobre la población ha sido una epidemia de cólera, la peor en los últimos cinco años y, que tan solo en los cinco primeros meses del presente año, ha causado 700 muertos y 36.000 casos.
El esperado inicio de la temporada de lluvias agravará la situación y la OMS calcula que los casos pueden llegar a 50.000 para finales de junio.
También han aumentado los casos de sarampión, con 6.500 enfermos, de los cuales el 71% tienen menos de cinco años.
Se requiere financiación de 103 millones de dólares para necesidades sanitarias
La OMS indicó que las necesidades sanitarias más urgentes en Somalia requieren una financiación de 103 millones de dólares, de las cuales, hasta ahora solo se ha recogido un 23%.
La propia OMS ha recaudado apenas el 10% de los 25 millones de dólares para su trabajo de emergencia en Somalia, una situación que espera que cambie con el resultado de la conferencia internacional de donantes para Somalia, que se realizó ayer en Londres.
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