Publicado en El Mundo El Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) se ha metido en un callejón sin salida. Tras recibir la autorización del director de la Fundación para la Investigación de La Fe, José María Millán, y de su gerente, Sabrina Femenía, el centro de referencia en infertilidad instaló su espacio de investigación en cerca de 700 metros cuadrados en la torre A, planta 1ª, del hospital de Malilla destinado a la ubicación de empresas científicas. Todo un esfuerzo que sólo ha recibido desprecios por parte de la Administración valenciana. Prueba de ello es que desde finales de marzo la Fundación científica del IVI destinó un presupuesto cercano a los 300.000 euros para adecuar sus instalaciones, pero todavía carece de los permisos de la Conselleria de Sanidad para legalizar su situación.