El estado de salud general de los estadounidenses mayores está mejorando, sobre todo los que tienen un nivel educativo alto, son ricos y blancos de piel, y es que así se desprende de un reciente estudio publicado en JAMA Internal Medicine.
Los investigadores trabajaron sobre una base de datos del gobierno federal de más de 55.000 adultos mayores. En concreto, revisaron datos entre el año 2000 y 2014 y, pudieron comprobar que los que tenían estudiso de postragdo presentaba una mejor tasa de buena salud (56 personas sanas por cada 1000), mientras que la tasa seguía igual entre los que solamente tenían un diploma de secundaria.
Los adultos mayores ricos tenían la mejor tasa de buena salud a lo largo del periodo de estudio, y es que aumentó de 490 personas sanas por cada 1000 a 603 por 1000.
Sí nos atenemos a los ingresos económicos, un 52% de los adultos mayores con buena salud tenían ingresos altos, frente al 31% que, a pesar de tener ingresos altos tenían una mala salud.
Las iniciativas de salud pública en Estados Unidos están dejando atrás a algunas personas
Los blancos eran más propensos que los negros o los hispanos a tener una buena salud, y es que la tasa de buena salud entre los blancos aumentó de 442 por cada 1000 a 533 por cada 1000 durante el estudio, mientras que la tasa de buena salud de negros e hispanos siguió igual.
Matthew Davis, profesor asistente en la Facultad de Enfermería de la Universidad de Michigan y autor del estudio, dijo que las disparidades en el estado de salud basadas en la raza, los ingresos y el nivel educativo le “sorprendieron”, y es que “las crecientes disparidades en la salud son particularmente llamativas dado que los estadounidenses mayores tienen acceso a la atención de la salud a través de Medicare”. Para Davis, este estudio pone de manifiesto que “la falta de mejora en la salud en todos los grupos podría implicar que las iniciativas de salud pública están dejando atrás a algunas personas”.
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