Publicado en Con Salud A falta de sólo unos meses para que se cumpla el plazo previsto por la Generalitat, la consejera de Sanidad de Valencia, Carmen Montón, insiste en la necesidad de acabar con las concesiones sanitarias y revertir el modelo de Ribera Salud hacia la gestión pública directa, una vez que en 2018 cumpla el contrato actual. La insistencia, sin embargo, persiste pese al aluvión de datos que ratifican la eficiencia del modelo en los últimos años. Concretamente, un recientemente informe de la Intervención General de la Generalitat ha avalado que las prácticas del órgano de contratación “se ha ajustado a los pliegos en las liquidaciones anuales de las concesiones de Alzira y Torrevieja”, referentes al período 2002-2012. Con ello, por tanto, se disipan las dudas mostradas por el Ejecutivo autonómico en relación al control financiero realizado a las concesiones.