Dos estudios científicos estadounidenses aseguraron que los perros podrían proteger a los niños del eccema y del asma.
En la primera investigación, los autores indicaron que los bebés nacidos en una casa donde hay perro durante el embarazo recibe protección del eccema alérgico. El estudio examinó la exposición de pares madre-hijo a un perro, lo cual fue definido como tener uno o más perros dentro de la casa durante al menos una hora diaria.
El autor del estudio, Edward Zoratti, miembro del Colegio Americano de Alergia, Asma e Inmunología (ACAAI), explicó que “Encontramos que la exposición de la madre a perros antes del nacimiento de un niño se asocia de manera significativa con un riesgo menor de eccema para la edad de dos años, pero este efecto protector baja a los 10 años”.
En el segundo análisis, los científicos mostaro que los perros podrían ofrecer un efecto protector contra el asma incluso en los niños alérgicos a los perros. En el estudio examinaron los efectos de dos tipos diferentes de exposición a perros en niños con asma en la ciudad de Baltimore.
El primer tipo fue la proteína o alérgeno que afecta a los niños alérgicos a los perros y el segundo tipo fueron elementos como las bacterias que el perro podría portar.
Los investigadores concluyeron que la exposición a elementos no alérgenos que los perros portan podría tener un efecto protector contra los síntomas del asma, pero que la exposición al alérgeno podría tener como resultado más síntomas de asma entre los niños urbanos alérgicos a los perros.
El autor del estudio Po-Yang Tsou, de la Universidad Johns Hopkins, indicó que “parece haber un efecto protector contra el asma en las exposiciones no alérgenas vinculadas con perros y un efecto dañino en la exposición al alérgeno”.
Los investigadores señalan que las personas alérgicas a los perros deben trabajar con su médico para reducir la exposición.
..Diego Armando M
