Publicado en Médicos y Pacientes Las personas afectadas de esquizofrenia tienen un 20 por ciento menos de esperanza de vida que la población general, lo que significa unos 15 años menos, según se desprende de un estudio presentado durante el Congreso de la Asociación Mundial de Rehabilitación Psicosocial (WARP, por sus siglas en inglés). Además, las personas con depresión y esquizofrenia tienen entre un 40 y un 60 por ciento de posibilidades de morir de manera prematura. Asimismo, el 60 por ciento de los fallecimientos se deben a enfermedades somáticas como el síndrome metabólico o complicaciones cardiovasculares y respiratorias, mientras que el 28 por ciento se deben a suicidios y solo el 12 por ciento a accidentes, según se desprende del estudio que ha sido realizado por expertos de la Línea de Rehabilitación Psicosocial (LRHP) de las Hermanas Hospitalarias. Por otro lado, “las personas con trastorno mental grave (TMG) presentan una mayor tasa de comorbilidad física y mayor incidencia de mortalidad por trastornos físicos que la población general debido tanto a hábitos deficitarios de salud como a los efectos secundarios de los tratamientos farmacológicos”, añade Ana Belén Guisado, directora del Centro de Día Arturo Soria y EASC Charmartin y Salamanca de Hermanas Hospitalarias.