..Flor Cid.
La problemática causada por el uso inadecuado de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC) es una realidad que afecta especialmente a la población adolescente, la que muestra un mayor nivel de sensibilidad hacia el desarrollo de conductas potencialmente adictivas y de dependencia. El limite entre el uso normal y el abuso de este tipo de herramientas no está bien definido y es preciso diferenciarlo. Para ello, desde la Unidad de Trastornos Mentales en la Infancia y Adolescencia de la Clínica de La Luz se ha llevado a cabo una jornada para abordar este contexto, cuyas señales de alarma se asemejan a las de otras adicciones, según ha explicado el Dr. José Luis Pedreira Massa, psiquiatra infanto-juvenil del centro.
Y es que la obsesión con estar conectados incluso de manera nocturna repercute en que, después, los adictos sientan irritabilidad y experimenten cambios de humor cuando no están en contacto con sus dispositivos, tal y como ha expuesto el Dr. Carlos González Navajas, psiquiatra infanto-juvenil del centro. De este modo, se ven alterados tanto los ritmos del sueño como los de la comida, debido a la hiperadicción y la excitabilidad.
Se ven alterados tanto los ritmos del sueño como los de la comida, debido a la hiperadicción y la excitabilidad
Cabe destacar, y ha sido una de las conclusiones más evidentes de la jornada, que hay una diferencia de perfil de paciente según el sexo, siendo en el caso de los chicos personas más tímidas y retraídas, y en el caso de las chicas pacientes con dificultades para comunicarse, pese a aparentar un carácter sociable.
Principal abordaje terapéutico: separar al adolescente del tóxico
El principal abordaje terapéutico en esta adicción consiste en separar al adolescente del tóxico, en este caso, de los dispositivos tecnológicos, los juegos online y las redes sociales. Debido a la dificultad que esto entraña, los expertos recomiendan apoyarse en las unidades de hospitalización para estos casos, como la puesta en marcha recientemente en el Hospital La Luz. Esta unidad sirve para llevar a cabo un tratamiento de desintoxicación, libre de nuevas tecnologías y que propicia al adolescente recuperar su ritmo de vida normal. Además, se desarrolla una terapia familiar, por la influencia del entorno más cercano.
Los expertos recomiendan apoyarse en las unidades de hospitalización para los casos más graves, como la puesta en marcha recientemente en el Hospital La Luz
Por su parte, la prevención se sitúa en el foco del abordaje de las conductas potencialmente adictivas, con pautas tales como alejar los dispositivos de la habitación del niño o del adolescente, estar presente cuando el menor está usando la tecnología para controlar el tiempo de exposición y los contenidos, así como disponer de las contraseñas de acceso a las redes sociales y otros canales por parte de los padres.
