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El sector de los complementos y suplementos alimenticios ha potenciado la investigación en los últimos años. Los estudios recientes puestos en marcha “se acercan cada vez más a ensayos clínicos de los medicamentos”, señala la Prof. María Marcela González-Gross, catedrática de la Universidad Politécnica de Madrid y vicepresidenta primera de la Sociedad Española de Nutrición. El gran avance, a su juicio, ha sido “la mejora de la metodología”. Un mayor número de empresas llevan a cabo en la actualidad “estudios rigurosos aleatorios con grupo placebo. Se están registrando en las plataformas de registro de ensayos clínicos” con el objetivo de comprobar la eficacia de estos suplementos.
El big data permite ir más allá. “Los metanálisis y la revisiones sistemáticas nos están permitiendo juntar datos de muchos estudios para poder tener cada vez más evidencia”, sobre complementos y suplementos, añade la Prof. González-Gross. Los profesionales sanitarios y los pacientes, por tanto, cuentan con más información sobre estos productos. Por este motivo, el Dr. José Manuel Fernández, coordinador del Grupo de Trabajo Nutrición de Semergen, insiste en la necesidad de acudir a “fuentes fiables”. El médico de atención primaria destaca que determinados complementos han demostrado eficacia y seguridad, aunque reclama “estudios a más largo plazo”.
Los estudios sobre complementos y suplementos recientes puestos en marcha “se acercan cada vez más a ensayos clínicos de los medicamentos”
La vitamina D, el ácido fólico, los ácidos grasos omega-3 pueden aportar beneficios a los pacientes. En estos casos es importante una buena comunicación con el médico para la detección de estas carencias y déficits. Existen otros casos donde la suplementación puede jugar un papel clave. Cada vez resultan más comunes la detección de casos de intolerancia a la lactosa o la celiaquía.
“Se está investigando mucho, y por eso también se ha avanzado en el conocimiento de las intolerancias y de las alergias alimentarias. Se está también trabajando mucho en el diagnóstico porque no es fácil”, destaca la Prof. González-Gross. En este sentido, destaca el papel de la industria que “está intentando aportar soluciones de alimentos aptos para las personas que realmente tengan esas alergias y esas intolerancias”.
Otro grupo de personas que acude con mayor frecuencia a la consulta son las personas vegetarianas o veganas. “Generalmente, por la experiencia que tenemos, son personas que están muy informadas sobre los déficits nutricionales. Probablemente está en un nivel bastante avanzado”, afirma el Dr. Fernández.
En esta línea, la Prof. González-Gross apunta que un vegetariano estricto o un vegano no va a poder prescindir de los suplementos. “Solo con alimentación vegana o vegetariana no va a poder cumplir con los nutrientes que se necesitan”, añade. Los especialistas coinciden en que estos complementos y suplementos resultan seguros gracias tanto a la normativa europea como española “que son muy estrictas”.
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