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La compañía farmacéutica Hipra ha adquirido la empresa biotecnológica GoodGut. Esta biotecnológica está dedicada a la investigación y el desarrollo de pruebas diagnósticas para enfermedades digestivas. Con esta operación, Hipra asegura que se refuerza la división de Salud Humana. Además, es una muestra de que sigue apostando por la prevención y por ofrecer a la sociedad unos productos innovadores.
GoodGut está dedicada al diagnóstico precoz para mejorar la salud digestiva
La empresa GoodGut está ubicada en el Parque Científico y Tecnológico de la Universidad de Girona. Fue fundada por Mariona Serra Pagès, Xavier Aldeguer, Jesús Garcia-Gil y Jaume Amat en 2014 como spin off de la Universidad de Girona y del Instituto de Investigación Biomédica de Girona Doctor Josep Trueta (Idibgi). Se centra en el desarrollo de soluciones tecnológicas basadas en la microbiota intestinal que permitan obtener un diagnóstico preciso, fiable y económico para el sistema sanitario y mejorar la calidad de vida de los pacientes que ven comprometida su salud digestiva. En siete años, GoodCut tiene tres productos de diagnóstico con presencia en más de 79 centros de España y tres en fase de desarrollo.
Desde GoodGut se considera que “esta operación culmina el éxito de nuestro proyecto, al permitir la expansión mundial de nuestros productos de la mano del socio más idóneo: fuerte y del territorio”. Asimismo, destacan que “esta adquisición supone un éxito para el sector biotecnológico, en el que son pocas las startups que logran expandir y consolidar su proyecto a través de fusiones o adquisiciones, y es un indicador de la madurez del ecosistema emprendedor”.
Futuro de la compañía
Se junta el talento y el know-how de GoodGut a la experiencia y la capacidad de Hipra. Esto permitirá desarrollar, producir y comercializar pruebas diagnósticas innovadoras para detectar enfermedades del aparato digestivo como el cáncer colorrectal. Este es el primero de los cánceres en términos de incidencia y mortalidad en España y el tercero del mundo. También permitirán detectar otras enfermedades inflamatorias intestinales como la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa o el síndrome del intestino irritable, una afección que tarda entre 1 y 5 años a detectarse.
