Sofía Haselgruber (n.1 MIR 2022): Los tutores de la residencia me enseñarán la profesión

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..Redacción.
Sofía Haselgruber ha sido la número uno del MIR 2022 según el listado provisional. Natural de Lalín (Pontevedra) ha manifestado su intención de elegir la especialidad de Dermatología. Pertenece a una generación que ha terminado la carrera de medicina en medio de la pandemia, con toda la dificultad que eso supone. En una entrevista con iSanidad ha explicado como los tutores se han enfrentado a esa realidad con todos sus alumnos. Sofía Haselgruber considera que es más fácil para todos la medicina presencial. Además, es consciente de la responsabilidad de los tutores, que serán quienes la formen para aprender la profesión.

¿Por qué decidió estudiar medicina?, ¿qué es lo que más le atrae de la profesión?
Desde pequeña he sentido curiosidad por entender cómo funciona el cuerpo humano. Entré en la carrera por inquietud intelectual, quería conocer cada detalle y tener respuesta a cada pregunta sobre la fisiología y la patología del cuerpo humano. Durante las prácticas de la carrera en hospitales y centros de salud, descubrí que me gustaba aplicar los conocimientos que estaba adquiriendo para resolver los problemas de salud de las personas. En definitiva, descubrí que quería ser médico.

La número 1 del MIR 2022 ha asegurado que desde pequeña ha sentido curiosidad por entender cómo funciona el cuerpo humano

Lo que más me atrae de la medicina es poder ayudar a las personas a mantener su salud, mediante la prevención, tratamiento y rehabilitación de las lesiones y enfermedades y, cuando nada de esto sea posible, paliando el sufrimiento y acompañando al paciente.

Pertenece a una generación que lo ha tenido muy complicado con la pandemia. ¿Cómo adaptó sus prácticas, estudio, tiempo libre…?
Al inicio de la pandemia, mis prácticas del segundo cuatrimestre de quinto curso se suspendieron. En sexto, mi facultad mantuvo todos los rotatorios de este curso, que en la USC es un año exclusivamente práctico. Hubo servicios en los que se veía un menor número de pacientes presenciales y más consultas telefónicas. Es indudable que los médicos pueden atender mejor al paciente y los estudiantes aprender más si el paciente está delante. Los tutores de prácticas compensaban esto explicándonos muchas más cosas acerca de las enfermedades que veíamos, de sus tratamientos, de los proyectos de investigación en los que estaban trabajando, nos exponían casos clínicos infrecuentes…

“Es indudable que los médicos pueden atender mejor al paciente y los estudiantes aprender más si el paciente está delante”

En cuanto a la preparación del MIR, escogí una academia con clases diarias presenciales en Oviedo, pero con la pandemia decidieron impartirlas online. Esto me permitió quedarme en mi casa, con mi familia y amigos, cuyo apoyo fue decisivo para superar el reto psicológico que supone preparar el MIR.

¿Qué puede hacer que se decida por dermatología o cambie de especialidad en el último momento?
Cuando los medios dieron a conocer que quiero elegir dermatología, algunas personas lo cuestionaron, por lo que reconsideré de nuevo mis opciones. Durante este tiempo me han contactado médicos de otras especialidades que también me gustan, y también dermatólogos. Cuanto más descubro sobre los distintos aspectos de la dermatología, más me afianzo en mi decisión de hacer esta especialidad. Por esto, no creo que cambie mi decisión en el último momento.

Sofía Haselgruber: “Cuanto más descubro sobre los distintos aspectos de la dermatología, más me afianzo en mi decisión de hacer esta especialidad”

¿Piensa que el examen MIR es adecuado?, ¿ayuda a saber más medicina o es solo “miricina”?, ¿hay que cambiar algo?
Lo mejor que tiene el MIR es que es un examen objetivo. Las preguntas son las mismas para todos, realizadas el mismo día, a la misma hora y corregido por una máquina. Es un examen teórico en el que no solo se valora conocimiento puramente memorístico. Existen preguntas formuladas para evaluar la capacidad de deducción, de asociación entre especialidades, preguntas que te exigen escoger el mejor entre varios tratamientos posibles para un paciente determinado… Pero este formato de examen tiene carencias a la hora de valorar otras de las capacidades prácticas que se le exigen a un médico.

Lo ideal sería que en este examen se preguntaran los conceptos clave de cada especialidad, conceptos que todo médico debe conocer independientemente de su especialidad. El problema es que los opositores ya nos sabemos todos esos conceptos. Cada año estamos más preparados y, consecuentemente, el examen MIR es más exigente e incluye conceptos difíciles con el objetivo de intentar discriminar.

Para Sofía Haselgruber el MIR es un examen objetivo, pero tiene carencias a la hora de valorar otras de las capacidades prácticas que se le exigen a un médico

Preparándolo he aprendido tanto medicina como “miricina”. Para superar el examen MIR, es necesario desarrollar un sexto sentido que permita reconocer cuál es la respuesta correcta basándose en ciertos patrones y “señales”, así como tener claras ciertas asociaciones que te garantizan netas.

También he aprendido medicina porque el temario de las academias incluye el manejo de enfermedades y situaciones a las que todos los médicos tenemos que saber enfrentarnos. En este sentido en la facultad ya aprendí medicina, pero preparar el MIR me dio la oportunidad de repasarlo todo de nuevo, incorporar conceptos en los que en la carrera no pude incidir lo suficiente, estar al tanto de las últimas guías y protocolos… Además, en los 7 meses de la preparación MIR estudié todas las asignaturas en un periodo corto de tiempo, lo que me facilitó adquirir un conocimiento transversal, e interrelacionar las distintas especialidades entre sí.

Está claro que estudiar el MIR no me ha preparado para ver pacientes en la vida real. Son los tutores de la residencia y el resto del personal sanitario los que día tras día me instruirán en mi proceso de formación y aprendizaje de la profesión

¿Se puede sacar un buen número en el MIR sin estudiar en una academia?
Un buen número es aquel que te permite escoger la plaza que quieres, sea un 200 o un 5000. No es imposible conseguir un buen número en el MIR sin academia, pero sí más difícil. Las academias ofrecen muchos recursos que facilitan sacar el máximo provecho a cada día de estudio.

”Un buen número es aquel que te permite escoger la plaza que quieres”

Uno de estos recursos son sus bancos de preguntas tipo test. El MIR es un examen tipo test y tan importante como saber medicina es saber enfrentarte a este formato de examen. En todas las academias se dedican una o dos horas cada día a hacer preguntas tipo test. Se hacen preguntas sobre los aspectos más preguntados en el MIR, también sobre temas importantes aún no preguntados, sobre las últimas novedades en la medicina… Incluso hay preguntas imposibles, sobre conceptos muy específicos que ni siquiera vienen en el temario de las academias, cuyo objetivo es entrenar para el día del examen MIR no sorprenderse al ver alguna pregunta de una enfermedad que ni sabías que existe.

Otro aspecto diferencial es que la academia tiene un equipo que recopila y mantiene informados a los alumnos de las últimas novedades en guías clínicas, fármacos, nuevas técnicas diagnósticas y tratamientos… conceptos candidatos a ser preguntados en el examen. Sin este material, el opositor tendría que invertir mucho tiempo en buscar y filtrar él mismo esta información.

¿Cómo le gustaría verse profesionalmente dentro de 25 años?
En 25 años me gustaría verme con la misma ilusión y motivación que tengo hoy. Quiero tener las mismas ganas de dar lo mejor de mí en cada cosa que haga, seguir aprendiendo y mejorando para ofrecer la mejor atención posible a los pacientes. Me gustaría verme en proyectos de investigación, con el objetivo de alcanzar resultados que se apliquen en mejorar la salud de las personas.

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