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Uno de cada tres pacientes con cáncer termina desarrollando complicaciones cardiovasculares, una realidad que en muchos casos viene causada por las terapias antitumorales, que adelantan unos 20 años la edad de riesgo cardiovascular. Para prevenir y tratar el posible daño que se puede producir en el corazón y en el sistema cardiovascular durante los distintos procesos antitumorales y después de ellos, surgió la cardio-oncología, una área específica para la que se acaban de presentar las primeras guías clínicas en europeas, lideradas por especialistas españoles.
Los tratamientos frente al cáncer adelantan 20 años la edad de riesgo cardiovascular. La cardio-oncología trata de prevenirlo
Las primeras guías sobre los efectos de los tratamientos oncológicos en el sistema cardiovascular se han dado a conocer en el VIII Simposio Internacional de Cardio-Oncología Cardio Tox 2022 celebrado en el Hospital Universitario La Paz de Madrid. El encuentro, organizado por el hospital público y la Sociedad Española de Cardiología (SEC), reunió a especialistas de todo el mundo en este nuevo campo de conocimiento. Además, a su inauguración acudió el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero.
Se trata de las primeras guías de la Sociedad Europea de Cardiología sobre cardio-oncología. La Dra. Teresa López-Fernández, especialista de La Paz y coordinadora del grupo de trabajo de cardio-oncología de la SEC, y el Dr. Alexander Lyon, del Instituto Nacional del Corazón y los Pulmones del Imperial College y del Servicio de Cardio-Oncología del Hospital Royal Brompton de Londres, han dirigido la elaboración de las guías, en las que han participado especialistas nacionales e internacionales.
Las primeras guías clínicas de la Sociedad Europea de Cardiología sobre la materia se han presentado en el VIII Simposio Internacional de Cardio-Oncología Cardio Tox 2022 en el Hospital La Paz
Los autores señalan que los avances terapéuticos en el manejo de los pacientes con cáncer, así como la prevención y detección precoz de los tumores más frecuentes han supuesto una mayor supervivencia. También han traído una evolución desde un enfoque centrado en la enfermedad hacia otro que gira en torno a la persona. Y la cardio-oncología es un ejemplo de ello.
En la actualidad, uno de cada tres pacientes con un nuevo diagnóstico de cáncer
tiene antecedentes de problemas cardiovasculares o factores de riesgo que lo
hacen más vulnerable a las terapias antitumorales. A su vez, los tratamientos frente al cáncer pueden favorecer el desarrollo precoz de hipertensión o diabetes, aumentar las cifras de colesterol, desencadenar arritmias, insuficiencia cardiaca o aumentar el riesgo de trombosis.
La cardiotoxicidad es un problema clínico creciente. Junto con las segundas neoplasias, constituyen la causa más frecuente de mortalidad en supervivientes de cáncer
La cardiotoxicidad es un problema clínico creciente. Junto con las segundas neoplasias, constituye la causa más frecuente de mortalidad en supervivientes de cáncer. Puede aparecer tanto durante la fase activa del tratamiento como en el seguimiento posterior. Por ello, “es de vital importancia organizar estrategias de prevención, acompañar al paciente durante el proceso de la enfermedad y guiarle para mejorar su salud cardiovascular”, señalan desde La Paz y la SEC.
Para evitar mayores complicaciones cardiovasculares, los equipos de cardio-oncología se encargan de hacer una valoración cardiovascular completa previa del paciente para identificar aquellos que serán más vulnerables y necesitan de una vigilancia más estrecha. Avances en la imagen cardiaca como la ecografía tridimensional y técnicas avanzadas de resonancia cardiaca ya permiten monitorizar de forma precisa el tratamiento y detectar cambios subclínicos que son tratables. Así se previene su progresión a cardiopatías graves.
“Es de vital importancia organizar estrategias de prevención, acompañar al paciente durante el proceso de la enfermedad y guiarle para mejorar su salud cardiovascular”
Precisamente el Hospital La Paz es pionero en la implantación de este modelo de atención. En el año 2012 creó un equipo multidisciplinar de cardio-oncología, que inició su actividad clínica y de investigación con la puesta en marcha del registro CardioTox que lidera el Dr. José Luis López-Sendón. También cuenta con una consulta monográfica de alta resolución de cardio-oncología. Esta unidad atiende cada año a más de 1.500 pacientes. Además, desde 2014 desarrolla un programa de formación médica.
Un año después, la SEC creó un grupo de trabajo de cardio-onología y hematología junto a las sociedades de oncología médica y radioterápica y hematología. Este grupo ha generado diferentes documentos de consenso vías clínicas para facilitar el desarrollo de este tipo de programas en otros centros de todo el país.
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