G.M.
Hablar de salud mental y su atención en la infancia, en la adolescencia y en la primera juventud no requiere centrase únicamente en los aspectos médicos; educadores, psicopedagogos, trabajadores sociales o terapeutas ocupacionales también son pilares que conforman una atención integral en este tipo de patologías. Y eso es lo que se ha propuesto el I Congreso de Salud Mental Infanto-Juvenil que se celebra los próximos días 15, 16 y 17 de febrero en Salamanca.
Dr. Ramos-Quiroga: “Es el primer congreso que pretende tener una visión holística de la atención a la salud mental infanto-juvenil”
La Fundación para la Ayuda a la Infancia y Adolescencia en las Necesidades Especiales del Desarrollo (Fundaneed), organización nacida en Salamanca y que ha extendido su actividad en Castilla y León, se planteó que era el momento de reunir a todos los profesionales sanitarios, de la educación y los servicios sociales en un congreso científico. Convocó a pediatras, psicólogos, psiquiatras y otros profesionales para componer un comité científico que diera forma al programa del encuentro, con los temas “de mayor interés, actualidad y debate”, explica a iSanidad el Dr. Josep Antoni Ramos-Quiroga, jefe del Servicio de Psiquiatría del Hospital Universitario Vall d’Hebron de Barcelona y miembro del comité científico.
No es el primer encuentro sobre salud mental en la edad infantil y juvenil, pero sí el primero “que pretende tener una visión holística de la atención a la salud mental” en este grupo de edad. “Queremos que sea un punto de reflexión, que sirva a las nuevas generaciones de profesionales, con información actualizada, y sea punta de lanza para impulsar la mejora de la atención”, explica el especialista. Por eso cuenta entre sus participantes con psicólogos clínicos, personal de enfermería de salud mental, terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales, educadores, neurólogos, psiquiatras y pediatras, entre otros. “Intentamos que sea lo más inclusivo posible”, apunta el médico.
Entre sus participantes cuenta con psicólogos clínicos, personal de enfermería, terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales, educadores, neurólogos, psiquiatras y pediatras
Para todos estos perfiles se ha ideado un programa que “dará a conocer novedades desde un punto de vista bastante práctico”. “Queremos que las personas que están en el día a día trabajando con niños y adolescentes puedan tener nuevos conocimientos, nuevas formas de hacer abordajes y sean parte de la reflexión que hacemos”, explica el Dr. Ramos-Quiroga.
Entre los temas que abordarán los ponentes se encuentran los trastornos más frecuentes en el ámbito de la salud mental infanto-juvenil. “El TDAH puede suponer un impacto muy negativo en los niños y en los adolescentes, en los que puede tener una relación muy directa con el mayor riesgo de consumo de drogas, incluso con mayor riesgo en términos de mortalidad, por no hacer un buen manejo y tratamiento”, apunta el médico, que participará en una mesa específica sobre este trastorno.
“Dará a conocer novedades desde un punto de vista práctico. Queremos que las personas que trabajan con niños y adolescentes puedan disponer de nuevas formas de abordajes”
El impacto de la pandemia en la salud de este grupo de edad, la educación inclusiva, los trastornos por consumo de sustancias adictivas, la detección temprana del autismo, la salud y la educación sexual en la infancia y la adolescencia y las conductas de riesgo o el impacto de las redes sociales en trastornos de la conducta alimentaria, están entre los temas que se abordarán en profundidad.
“También trataremos las conductas suicidas y autolesivas en adolescentes. Nos preocupan de manera especial, porque no dejan de ser la expresión de que hay un malestar emocional intenso y, si no se abordan de una manera adecuada durante la adolescencia, se pueden cronificar dando lugar a trastornos más complejos”, explica el Dr. Ramos-Quiroga.
La neurología y la psiquiatría son dos especialidades muy relacionadas entre sí. Numerosas patologías neurológicas se manifiestan con síntomas psiquiátricos. Por eso, también estarán juntas en el congreso ambas especialidades para tratar diferentes aspectos del neurodesarrollo y sus trastornos.
Educación inclusiva, detección temprana del autismo, trastornos TDAH y TEA, adicciones, impacto de las redes sociales y conductas suicidas son algunos temas del congreso
Todos estos conocimientos pueden ser clave en el ámbito educativo. Maestros y educadores pasan mucho tiempo con los niños y pueden ser de gran ayuda en la detección temprana de algunos trastornos. Pero también en su tratamiento y mejoría. “Se pueden llevar intervenciones sencillas al aula, como, por ejemplo, en el caso de niños con TDAH, situarlos en las primeras filas de clase y revisar que lleven las cosas apuntadas en la agenda antes de salir”, afirma el psiquiatra.
Los resultados de todo este trabajo de preparación para un congreso científico se podrán ver en poco más de dos semanas en el Colegio Arzobismo Fonseca, el espacio que acogerá las tres jornadas de este encuentro multidisciplinar.