J.P.R.
El Ministerio de Sanidad trabaja en la incorporación del cribado de cáncer de pulmón a la Cartera Básica del Sistema Nacional de Salud. La puesta en marcha de un programa de screening a nivel nacional requiere superar una serie de retos, a ojos de María de Oyarzábal, directora de Diagnóstico por Imagen y Terapias Avanzadas de Siemens Healthineers en España. El primero es la reducción de la dosis de radiación, un objetivo que ya se habría superado con los nuevos equipamientos.
“Para que el screening sea efectivo la dosis es muy importante. Lo más indicado es un TAC con una dosis ultrabaja. Es tan baja con los nuevos equipamientos que puede resultar similar a la que se puede estar expuesto en un vuelo intercontinental. Hemos desarrollado equipos de TAC con dosis tan bajas que hacen justificable su uso en un programa de screening, gracias a una tecnología de filtro de estaño que está incorporada a todo nuestro portfolio”, subraya De Oyarzábal en una entrevista con iSanidad.
Una vez que se ha conseguido reducir la dosis de radiación al mínimo, “hay que concienciar al profesional sanitario y al paciente” para fomentar la utilización de estos equipamientos de diagnóstico. “A excepción del radiólogo, el especialista no es tan consciente de los niveles de radiación tan bajos que podemos dar”, añade.
María de Oyarzábal: “Para que el screening sea efectivo la dosis de radiación es muy importante. Lo más indicado es un TAC con una dosis ultrabaja”
Un segundo reto consistiría en la incorporación de herramientas de inteligencia artificial que ayuden al radiólogo. “Estamos trabajando mucho en la línea de soluciones de automatización para simplificar el proceso de diagnóstico. Por ejemplo, una herramienta artificial que identifique donde están los nódulos, cuantifique el enfisema… No se trata de sustituir al radiólogo sino de facilitarle el trabajo”, explica. Esta tecnología le permitiría identificar las áreas que debe observar, incluso priorizar las imágenes según la gravedad de los pacientes.
Esta tecnología en un contexto de escasez de radiólogos puede resultar clave para el Sistema Nacional de Salud. De Oyarzábal considera que el sistema sanitario está preparado hoy a nivel tecnológico. El Plan Inveat ha permitido una renovación de los equipos de diagnóstico que harían viable la implantación del cribado en todo el país. “La tecnología en muchos casos ya está implementada. Es muy posible que lo que falte en muchos sitios son estas herramientas de inteligencia artificial que no tienen que suponer una barrera poque ya las estamos viendo en muchos hospitales y están encantados por la carga de trabajo que reducen”.
No obstante, el cribado es una primera parte de un proceso. En caso de que exista sospecha de un tumor, el especialista requiere de una imagen con más detalle para confirmar la lesión o incluso comprobar la existencia de metástasis, “con otros equipos de imagen como un PET CT de alta precisión donde se pueda ver el detalle de la lesión exacta y las posibles metástasis. Una tercera fase sería el tratamiento”. Si en el screening detecta tumores pequeños, los tratamientos pueden ser menos invasivos y mucho más personalizados. En este sentido, la cirugía guiada por imagen puede ofrecer una solución al paciente.
Cribado de mama
El debate de la radiación está superado en cáncer de mama, uno de los tres cribados implantados en Cartera Básica y donde existe una mayor participación de la población. Los criterios son diferentes. Mientras que en mama, se establece por edad, en pulmón, se trata de cribar a los fumadores y personas con antecedentes familiares.
Mammomat Revelation presenta una serie de ventajas. En primer lugar, permite “realizar la mamografía convencional sin rejilla (necesaria para eliminar la radiación dispersa). Esto supone hasta un 30% de dosis recibida menos a las y los pacientes”, destaca directora de Diagnóstico por Imagen y Terapias Avanzadas de Siemens Healthineers en España. Se trata de una disminución que resulta clave en un programa de cribado. Otra de las ventajas es su tecnología de compresión optimizada. “Gracias a ella las mujeres solo reciben la compresión estrictamente necesaria, según las características físicas específicas de cada mama”, añade.
Mammomat Revelation permite “realizar la mamografía convencional sin rejilla (necesaria para eliminar la radiación dispersa). Esto supone hasta un 30% de dosis recibida menos a las y los pacientes”, destaca De Oyarzábal
Siemens Healthineers ha puesto en marcha el sistema Breast Health 360º, que acompaña a la paciente desde el diagnóstico hasta el tratamiento. La compañía ha incorporado también a sus equipamientos la tecnología de tomosíntesis gran angular de 50º para un mejor diagnóstico. “El tejido mamario tiene la peculiaridad de ser un tejido complejo con múltiples estructuras y densidades. Esto hace que en algunas ocasiones y con la mamografía convencional, las lesiones como distorsiones de la arquitectura o microcalcificaciones, que pueden significar cáncer de mama, queden ocultas o incluso se malinterpreten por el clínico como una posible lesión aumentando los falsos positivos”, pone de manifiesto De Oyarzábal.
Con esta tecnología, “el clínico tiene una información más precisa, evitando el efecto de la superposición de los tejidos y resaltando de forma más eficiente las verdaderas lesiones”, subraya. Con la detección temprana y las terapias avanzadas se mejora la supervivencia y la vida de los pacientes. Los avances de la tecnología van en la dirección de mejorar la calidad y la accesibilidad en el cuidado del cáncer, para todos, en todas partes.
