Gema Maldonado
La brecha salarial que separa a hombres y mujeres y perjudica a estas últimas llega al 28,39% en las profesiones sanitarias y de servicios sociales, en un sector de actividad formado en un 76,44% por mujeres. Esta diferencia supone que las mujeres en profesiones sanitarias y de servicios sociales ganan casi un tercio menos que sus compañeros.
El 76,44% de los trabajadores de profesiones sanitarias y de servicios sociales son mujeres
Es el cuarto grupo de actividad con la mayor brecha salarial y se sitúa diez puntos por encima de la media de profesiones, según refleja un informe publicado el pasado mes de febrero por el Ministerio de Igualdad con datos correspondientes a 2020. La última Encuesta de Estructura Salarial del Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondiente a 2020, indica que las mujeres cobran de media un 18,72% menos. El salario medio de un hombre en España ese año fue de 27.642 euros y el de las mujeres de 22.467. Con esta diferencia, las mujeres tienen que trabajar dos meses más que los hombres, para ganar lo mismo.
Las profesiones sanitarias y de servicios sociales, mayoritariamente feminizadas, están en el top cinco de las que mayor brecha salarial soportan, solo por detrás de las actividades administrativas y de servicios sociales (31,07%), inmobiliarias (28,55%) y actividades profesionales, científicas y técnicas (28,48%).
En el sector privado, la brecha salarial es mayor que en el ámbito público
En el sector privado, la brecha se hace más pronunciada que en el público. Un hombre recibe un 16,2% más que una mujer por cada hora de trabajo en la empresa privada mientras que la diferencia en el ámbito público es del 10,3%. La brecha crece aún más cuando se trata de pensiones de jubilación, en las que la diferencia llega al 33,13%. La pensión media de los hombres en 2020 fue de 1.368 euros y la de las mujeres se quedó en 915 euros.
El informe del Ministerio de Sanidad analiza las causas de estas diferencias y concluye que la brecha “tiene mucho que ver con la infravaloración del trabajo de las mujeres y de la falta de corresponsabilidad en la asunción de responsabilidades domésticas y de cuidados”.
Las ocupaciones donde las mujeres son mayoría tienen salarios menores. En el caso de los hombres sucede lo contrario
Más de siete de cada 10 trabajadores de profesiones sanitarias y de servicios sociales son mujeres. Lo que tiene mucho que ver con la amplia brecha salariar en este sector de actividad. El informe, basado en el análisis de las profesiones y sus salarios, concluye que las ocupaciones donde las mujeres son mayoría tienen salarios menores. En el caso de los hombres sucede lo contrario.
La falta de corresponsabilidad es otro de los grandes factores que condicionan la igualdad salarial. Las oportunidades de las mujeres de progresar laboralmente y percibir un mayor salario suelen verse condicionadas por las responsabilidades familiares. También tienen interrupciones en sus carreras, que vienen marcadas por el cuidado de niños o de personas dependientes. Un aspecto que no suele determinar la trayectoria laboral de los hombres.
Las oportunidades de las mujeres de progresar laboralmente y percibir un mayor salario suelen verse condicionadas por las responsabilidades familiares
“Resulta fundamental una mayor corresponsabilidad entre mujeres y hombres en las tareas domésticas y de cuidados, así com un mayor uso de las medidas y permisos de conciliación por parte de los hombres“, apunta el documento.