Anuario iSanidad 2022
Dr. Antonio Fernández-Pro Ledesma, presidente de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG)
Año tras año, nos invitan a hacer artículos de reflexión sobre la situación de la atención primaria y nuevamente, aunque intentamos ser optimistas, la aplastante realidad que vivimos a diario en las consultas nos embarca en pensamientos pesimistas, sin que haya por parte de Administración central visos de que vaya a mejorar.
Lo que podría haber sido una buena noticia, como es el incremento presupuestario para el primer nivel asistencial, tras ser analizado someramente, nos lleva de nuevo a la tristeza y desasosiego. El crecimiento del 6,7% en los presupuestos generales del Estado supone unos 500 millones más de euros y eso es poco más que la cantidad irrisoria de diez euros más por habitante. Dentro de ese incremento se incluye desde la cuarta dosis de la vacuna contra el Covid-19 hasta la salud bucodental. ¿Es suficiente ese incremento presupuestario para afrontar la situación que está viviendo la atención primaria? El dinero es necesario, pero el problema de la atención primaria no se arregla solo con dinero. Hace falta imaginación y voluntad política para hacerlo. Hay que hacer una política de recursos humanos innovadora.
Los temas de actualidad en nuestra especialidad, medicina de familia, siguen siendo los mismos en 2022: una reforma fallida, falta de personal y de recambio generacional, una demanda de servicios creiente que no se frena y escenarios laborales poco atractivos para los médicos jóvenes. Todo esto sumado a la perenne descoordinación con atención hospitalaria. Desde la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) llevamos pidiendo mucho tiempo un profundo cambio de modelo que nos lleve a un incremento de la capacidad resolutiva en atención primaria, todo ello facilitado a través de las nuevas tecnologías.
Cualquier mejora del modelo sanitario pasa por una atención primaria más fuerte
Siempre bajo la premisa de que, cualquier mejora del modelo sanitario pasa por una atención primaria más fuerte. La mejor estrategia para poder hacer frente a situaciones de incertidumbre, como la de la crisis sanitaria del coronavirus, pasa por el fortalecimiento de la atención primaria, y para ello hace falta visión, valentía y más presupuesto, así como contar con los profesionales sanitarios. Necesitamos un sistema sanitario y una salud pública más eficientes, más fuertes, mejor organizados y preparados para eventuales situaciones similares que se puedan dar en el futuro y, para conseguirlo, serán necesarios nuevas inversiones, cambios organizativos y procedimientos más eficientes. El futuro exige más prevención, más salud pública y un Sistema Nacional de Salud reforzado y más cerca de las personas.