Luis de Haro. Director general de iSanidad
Pedro Sánchez ha elegido a José Miñones para la cartera de Sanidad. Tiene un pasado farmacéutico, fue investigador y docente, pero llega envuelto en el manto político de la cercanía con el presidente. José Miñones es licenciado en Farmacia, pero es un afín a Pedro Sánchez, uno de los que le apoyó para “recuperar” el partido. Tan poco interés hay en el sistema sanitario que no ha colocado, sin disimulo, a alguien sin conocimiento ni experiencia. También es verdad que, sobre el papel, está más capacitado que Carolina Darias o Salvador Illa, que realmente no sabían nada del sistema. Al menos el nuevo ministro tiene estudios sanitarios.
Pedro Sánchez no ha disimulado su falta de interés al colocar a José Miñones al frente de Sanidad
El propio Pedro Sánchez le ha dado a José Miñones una corta legislatura, de nueve meses. En ese tiempo será difícil comenzar la “refundación” de la atención primaria o mantener una agenda con todos los agentes del sector sanitario. Su tiempo estará en manos de quien tiene algo más de experiencia y conocimiento. Silvia Calzón, secretaria de Estado, o César Hernández, director general de Cartera Común de Servicios, tendrán más peso en las decisiones. Las elecciones autonómicas, el verano y la campaña de las generales no le dejarán apenas tiempo para un Ministerio cada vez más politizado.
Sánchez ha mandado a Darias hacia la alcaldía de Las Palmas, si logra alcanzarla. Estos meses estarán marcados por el caso “Tito Berni”, pero la auditoría que prometió el Ministerio por la gestión de la pandemia caerá en el olvido. Si no lo hizo Illa, no lo hizo Darias, nada hace pensar que lo vaya a hacer Miñones. En septiembre de 2021 el Ministerio se dio cuatro meses para presentar conclusiones y nada hace pensar que vaya a llegar ahora. El aumento de plazas MIR, el plan Inveat o los primeros pasos de la Agencia de Salud Pública son un pobre legado. La reforma de la elección de plaza MIR, el abordaje de la cronicidad, la aprobación de las nuevas especialidades o la carrera profesional son cuestiones que quedan en el limbo.
Cuando José Miñones conozca su Ministerio y los agentes que forman parte del sistema la legislatura se habrá acabado
Miñones se enfrenta también a las peticiones de los profesionales. Ya le han pedido reformar el Estatuto Marco de la Sanidad, aumentar la financiación o más plazas MIR para la atención primaria. Fundación IDIS, ASPE, Fenin, Farmaindustria o los pacientes ya le han brindado ayuda, pero el tiempo apremia y la agenda es intensa. No son muchas las esperanzas para este periodo.
Tomás Cobo le ha ofrecido la “colaboración” de los médicos. Están a “disposición de todas las administraciones para aportar nuestro conocimiento y promover soluciones”, ha dicho. Le ha recordado que el Decreto de Formación Médica Continuada y hacer realidad la Agencia Española de Salud Pública, son prioridades. Los farmacéuticos han recordado a Miñones que deberá afrontar “una etapa crucial”. Hay “importantes iniciativas en marcha en el ámbito nacional y la revisión de la legislación farmacéutica europea”, le ha dicho Jesús Aguilar. También las enfermeras han mostrado su apoyo y marcado el camino. “El sistema de salud está muy debilitado tras la pandemia, que ha hecho aflorar muchas áreas vulnerables. Toca redefinir bien el Sistema y plantear una buena planificación de cara a resaltar los puntos fuertes que tiene y minimizar las áreas deficitarias”. Florentino Pérez Raya ha insistido a Miñones en que cuente con las enfermeras.
Cuando José Miñones conozca su Ministerio y los agentes que forman parte del sistema la legislatura se habrá acabado. La culpa no es suya, el problema viene de más arriba.
