Preocupación por el mayor retroceso en vacunación infantil en 30 años

Organizaciones nacionales e internacionales advierten de que 67 millones de niños se han quedado sin vacunar entre 2019 y 2021 mientras la confianza en la vacunación infatil ha caído em casi todos los países, también en España

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Redacción
Las cifras de vacunación infantil en el mundo no son buenas, solo en el año 2021 25 millones de niños dejaron de recibir sus vacunas rutinarias y entre 2019 y 2021 67 millones de niños se han quedado sin vacunar a causa de la pandemia de Covid-19, es el mayor retroceso en vacunación infantil en los últimos 30 años, según los datos del informe Estado Mundial de la Infancia 2023 de Unicef, centrado este año en la vacunación infantil, que alerta de las preocupantes cifras y de las consecuencias que la falta de inmunización puede tener.

Solo en el año 2021 25 millones de niños dejaron de recibir sus vacunas rutinarias

No son los únicos datos que han hecho saltar las alarmas a estos organismos. La caída de la confianza en las vacunas es casi generalizada en el mundo. En el caso de España la confiazan en la vacunación infantil ha descendido ocho puntos hasta el 88%. A las advertencias de Unicef se ha unido este miércoles el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (CAV-AEP), con motivo de la Semana europea de las inmunizaciones, que se celebra del 25 al 30 de abril.

La Dra. Lucía López Granados, pediatra de atención primaria, resalta “la preocupación que tiene la sociedad y se une a la que ya han expresado Unicef y la Organización Mundial de la Salud (OMS). El retroceso en la vacunación infantil en tres años “ha provocado que en los últimos 12 meses ya se hayan registrado en el mundo brotes evitables de sarampión y de poliomelitis debido a los niveles de coberturas vacunales inadecuados“, señala la pediatra.

Dra. López Granados: “En los últimos 12 meses ya se hayan registrado en el mundo brotes evitables de sarampión y de poliomelitis debido a los niveles de coberturas vacunales inadecuados”

El CAV de la Asociación Española de Pediatría recuerda que entre los objetivos que se ha marcado este año el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) está la mejora de las coberturas vacunales. Pero también interventir para cubrir a los grupos de población infrainmunizados y actuar frente a la creciente reticencia de parte de la población a vacunarse. Intentan así contrarrestar los efectos de la desinformación.

El informe de de Unicef señala que las consecuencias de la pandemia de Covid-19 “han sido catastróficas” para la inmunización de los más pequeños. Con los datos disponibles, calculan que el mundo ha perdido más de una década de progresos en vacunación infantil en solo tres años. Uno de cada cino niños sigue sin recibir vacunas esenciales para su superviviencia. La desigualdad, la pobreza y la escasez de servicios y de acceso a la salud marcan las historias de la inmensa mayoría de los niños que no reciben vacunas. El informe indica que más de tres de cada cuatro niños sin vacunar se encuentran en 20 países.

En España, la percepción pública de la importancia de la vacunación infantil ha disminuido durante la pandemia, pasando del 96,5% al 88,6%

Pero también es preocupante el descenso de la confianza en las vacunas en países en los que sí se puede acceder a ellas. El estudio de Unicef incluye datos de 55 países. En todos ellos, menos en tres (China, India y México), la percepción pública de la importancia de la vacunación infantil ha disminuido durante la pandemia. En España, se ha pasado de una confianza del 96,5% al 88,6%.

“A pesar de que el desarrollo de las vacunas contra el Covid-19 fue un logro histórico sin precedentes que permitió salvar innumerables vidas, las consecuencias de la pandemia han provocado la mayor caída de las últimas décadas tanto en tasas de vacunación infantil como en la confianza de la sociedad en la inmunización”, apunta el director ejecutivo de Unicef España, José María Vera. “Aunque habrá que confirmar esta tendencia en los próximos años, son datos que representan una preocupante señal de alarma”, añade.

José María Vera: “Hay que evitar que la vacunación sistemática se convierta en otra víctima de la pandemia. Si esto ocurriera, la próxima oleada de muertes podría deberse a un aumento de sarampión, difteria u otras enfermedades prevenibles”

El directivo de Unicef creen que estos datos deben llevar tanto a la sociedad como a los gobiernos aredoblar el compromiso, aumentar la financiación de la inmunización y evitar que la vacunación sistemática se convierta en otra víctima de la pandemia. Si esto ocurriera, la próxima oleada de muertes podría deberse a un aumento en el número de niños y niñas con sarampión, difteria u otras enfermedades prevenibles”, ha añadido.

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