Inés Oria
En España mueren cada año 50.000 personas por causas atribuibles al tabaco, según datos de la Encuesta Europea de la Salud en España de 2020, aproximadamente un 75% de las muertes registradas por Covid desde el principio de la pandemia. “El tabaquismo se ha convertido en una epidemia silenciosa”, ha afirmado la Dra. Paula Chao, vicepresidenta de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semfyc) durante la presentación de la XXIV encuesta realizada por la organización científica con motivo de la Semana sin Humo que se celebra del 25 al 31 de mayo bajo el lema Mejor el paseo que el humo o el vapeo.
El documento revela que el 19,2% de los adolescentes de 14 a 18 años fuma o consume algún derivado del tabaco, y alerta de que este porcentaje aumenta hasta el 32,3% en la franja de edad que va los 19 a los 24 años.
Con motivo de la Semana sin Humo, Semfyc ha presentado los datos de la encuesta anual sobre consumo de tabaco
“Es muy grave que, en pleno 2023 más del 30% de los jóvenes de 19 a 34 años se considere fumador. Tenemos que revisar el mensaje que estamos dando y por qué nuestros jóvenes se siguen enganchando al tabaco y sus derivados“, ha insistido la Dra. Chao.
Una de las conclusiones más preocupantes para los expertos de Semfyc es el incremento que están experimentando los nuevos dispositivos, como los vapeadores, los cigarrillos electrónicos y las cachimbas, entre la población de menor edad.
De hecho, los vapeadores son los preferidos para uno de cada cinco adolescentes de entre 14 y 18 años, seguido de las cachimbas, que emplean el 14,3%, mientras que un 13,1% se decanta por los cigarrillos convencionales. En el siguiente grupo de edad, el tipo de consumo de tabaco se invierte, incrementándose la proporción de fumadores de cigarrillo convencional (19,1%) respecto a los que consumen vapeadores (13,8%) y cachimba (11,5%).
Los nuevos dispositivos, como los vapeadores y los cigarrillos electrónicos, han incrementado su uso notablemente entre la población más joven
“Esta distribución en los diferentes tipos de consumo en las edades más bajas refleja la actual tendencia entre los jóvenes de introducirse en el consumo de tabaco mediante el uso de vapeadores y cachimbas ante la falsa sensación de inocuidad de estos dispositivos que se ha divulgado mediante las campañas de marketing con intereses comerciales dirigidas especialmente a a los más jóvenes”, ha explicado la Dra. Susana Morena, coordinadora de la Semana Sin Humo de la Semfyc.
De hecho, la encuesta señala que solo el 62% de los participantes sabe que la cachimba es perjudicial tanto si se usa con tabaco como con productos sin nicotina. El 29,7% desconoce también los efectos perjudiciales que tiene este dispositivo. “Hay evidencias del efecto perjudicial que estas nuevas formas de consumo tienen en las vías respiratorias y también de la lesión que producen en el ADN de diferentes tipos de cáncer”, ha recalcado la Dra. Morena.
El 93,2% de los encuestados entre 19 y 34 años manifiesta estar expuesto al humo ambiental de tabaco en paradas de autobús, terrazas e incluso en las puertas de centros educativos
El 49,4% de los encuestados considera que la normativa que regula el consumo de tabaco en las terrazas de hostelería no se cumple. Este porcentaje llega al 53,9% en Aragón, Baleares y Comunidad Valenciana, precisamente las comunidades que han regulado el consumo de tabaco en terrazas. “Es urgente que el Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas avancen en las políticas de regulación de consumo de tabaco en la totalidad del ámbito estatal y difundan con mayor intensidad entre la población los beneficios derivados de una normativa cuyo objetivo es proteger la salud de todos”, ha subrayado Susana Morena.
Exposición al humo ambiental del tabaco (HAT)
El grado de exposición al HAT sigue siendo elevado en España, como demuestra que el 84,7% de los encuestados manifiesta estar expuesto a él en diferentes situaciones de su vida diaria como en terrazas (74,4%), actividades lúdicas al aire libre (45,8%) o cuando esperan en la parada del autobús (34,3%). Llama la atención que los jóvenes de entre 19 a 34 años son los que manifiestan mayor exposición (93,2%).
Medidas para reducir el consumo de tabaco
Tal y como han explicado las representas de Semfyc, existe evidencia científica de que las medidas legislativas pueden reducir la prevalencia de consumo de tabaco en la población. En concreto, aumentar el precio del tabaco y financiar los tratamientos contribuirían a que los fumadores actuales dejen de fumar. El empaquetado neutro, la eliminación de la publicidad encubierta y medidas educativas en centros escolares ayudaría a que los más jóvenes no se inicien en el consumo de tabaco.