Redacción
Es necesario que exista un liderazgo europeo para que los sistemas sanitarios vayan en la misma dirección y se establezcan sinergias de forma eficaz. Así se ha puesto de manifiesto durante la jornada El pulso de la sanidad en Europa. Encuesta de sistemas sanitarios en la que se ha presentado un estudio comparativo de la percepción de los sistemas sanitarios europeos en Alemania, Francia, España y Portugal, realizado por Sigma Dos para la Fundación IDIS. “Todos los sistemas sanitarios europeos requieren un replanteamiento porque la percepción de los ciudadanos en general es bastante baja”, ha señalado Juan Abarca, presidente de la Fundación IDIS. En su opinión, los sistemas no se han adaptado a la evolución demográfica de la población (envejecimiento, cronicidad y salud mental).
Es necesario que Europa reflexione sobre las necesidades y retos a los que se enfrentan sus sistemas sanitarios, ya que como se ha evidenciado actualmente no se da respuesta a lo que la sociedad necesita
Juan Abarca ha señalado que la Unión Europea (UE) ha marcado unas líneas hacia donde deben de converger los sistemas sanitarios europeos (universalidad, equidad, accesibilidad, etc). “Por ese motivo, es el momento no ya de promover una convergencia, si no una transformación de los mismos hacia un sistema sanitario que garantice de la forma más homogénea posible esas características para todos los ciudadanos de la UE. Además, todos sabemos que nuestro sistema sanitario está pasando por unas dificultades terribles que ponen en riesgo nuestro modelo de salud, de ahí que sea imprescindible un pacto de los principales partidos para acometer las reformas que sean necesarias y garantizar el Estado de Bienestar para las próximas generaciones”, ha explicado.
La Encuesta de sistemas sanitarios. Estudio comparativo de la percepción de los sistemas europeos: análisis de Alemania, Francia, España y Portugal recoge la opinión de un total de 6.000 ciudadanos, con una muestra de 1.500 de cada país. Marta Villanueva, directora general de la Fundación IDIS, ha resaltado que “el estudio surge de la necesidad de poner en contexto la situación de nuestro sistema sanitario en la UE. El liderazgo europeo es imprescindible para la reformulación y reconstrucción de los sistemas sanitarios“.
Marta Villanueva: “El liderazgo europeo es imprescindible para la reformulación y reconstrucción de los sistemas sanitarios”
Dimensiones analizadas en la encuesta
Para analizar los datos se ha creado un índice de satisfacción IBS (índice de bienestar sociosanitario) que va de 0 a 100 y se han tenido en cuenta diferentes dimensiones (calidad, enfoque al paciente, profesionales, colaborativa, equidad en el acceso, eficiencia, innovación y tecnología, transparencia y financiación adecuada), que se basan en los principios del manifiesto IDIS Por una mejor sanidad. España ocupa el tercer lugar por detrás de Francia (primera) y Alemania (segunda) y se sitúa por encima de Portugal en todas las dimensiones salvo en la adecuación de la financiación. Nuestro país, pese a estar por detrás de Alemania, supera su media en los índices relacionados con la transparencia, equidad, innovación y tecnología y colaboración.
La calidad y el enfoque al paciente son los aspectos que reciben mayores puntuaciones, pero sus puntuaciones muestran que hay mucho margen de mejora
Según este análisis, la calidad (50,1) y el enfoque al paciente (47,9) son los dos aspectos que reciben mayores puntuaciones, pese a que son muy escasas en la escala sobre 100. En la dimensión de la asistencia de calidad, que valora la gestión de citas, la atención de servicios de urgencias y la atención hospitalaria, se obtienen 50,1 puntos. “La encuesta muestra que el enfoque al paciente consigue una puntuación de 47,9 puntos sobre 100 y analiza la consideración de los representantes del paciente y la atención de sus necesidades”, ha indicado Marta Villanueva.
La transparencia alcanza 46,2 puntos sobre 100 y se ha valorado a través de tres aspectos: la accesibilidad a los resultados, la posibilidad de compartir la historia clínica y la transparencia de la publicación de datos sanitarios. A modo de ejemplo, se puede destacar que España se encuentra en la segunda posición cuando se menciona la compartición de la historia clínica. En la dimensión colaborativa se pregunta por el grado de participación público-privado y se obtiene una valoración media global de 41,2 puntos.
La transparencia es valorada con 46,2 puntos, seguida de la eficiencia, la relación con los profesionales y la dimensión equitativa
En relación a la eficiencia se llega a los 45,4 puntos sobre 100 en IBS y para su obtención se han valorado el uso adecuado de recursos humanos, infraestructuras, equipos y materiales. La relación con los profesionales obtiene 44,3 puntos y le sigue de cerca la dimensión equitativa que consigue 43,8 puntos sobre 100. En esta dimensión se formulan preguntas sobre la facilidad del acceso con independencia de la situación socioeconómica o de la zona de residencia.
En aspectos de innovación y tecnología se logra una calificación de 41,1 puntos sobre 100, habiendo consultado a los ciudadanos sobre la innovación de procesos para mejorar la asistencia o la puesta a disposición de los últimos avances tecnológicos, digitales y terapéuticos. La financiación obtiene 39,5 puntos sobre 100, y está basada en la opinión sobre la suficiencia de la financiación y la distribución de la misma. Por último, también se ha preguntado por la cantidad de profesionales, la comunicación y la cesión de datos.
La dimensión colaborativa, innovación y tecnología y financiación son, por ese orden, las áreas peor valoradas globalmente
Resultados por países
Francia es la que obtiene mejores puntuaciones y tan solo le supera Alemania en calidad percibida por sus ciudadanos. “En los países de la península ibérica, tanto España como Portugal, las dimensiones mejor valoradas son la calidad y la transparencia. Sin embargo, en España las puntuaciones más bajas corresponden a la financiación, seguida de la innovación y la tecnología; al igual que en Portugal, aunque en orden inverso”, ha detallado la directora general de la Fundación IDIS.
Un aspecto destacado es la diferencia en la valoración de la necesidad de colaboración y coordinación a nivel europeo. España y Portugal muestran una mayor valoración de la importancia de coordinación en este ámbito. En cambio, en Francia y Alemania, obtienen puntuaciones más moderadas en estas dimensiones. Según ha expuesto Marta Villanueva esto podría interpretarse como una mayor sensación de autosuficiencia con sus propios sistemas de salud en Alemania y Francia, mientras que España y Portugal muestran una mayor necesidad de colaboración con otros países.
En España, que ocupa el tercer lugar, las puntuaciones más bajas corresponden a la financiación, seguida de la innovación y la tecnología
Además, se observa un mayor acuerdo con el hecho de que Europa asuma más competencias en los países ibéricos (España y Portugal) en comparación con Alemania y Francia. La media de los cuatro países muestra que más de la mitad de los encuestados están de acuerdo con este aspecto. En concreto, en España y Portugal la percepción de la necesidad de apoyo externo es mayor que en Alemania y Francia.
Ángel de Benito, secretario general de la Fundación IDIS, ha clausurado la jornada reiterando la importancia de reflexionar sobre la percepción que los ciudadanos tienen de los sistemas de salud y la necesidad de buscar soluciones innovadoras para avanzar hacia un futuro más saludable y equitativo.
“Es importante recordar que, a pesar de los diferentes modelos, el objetivo es común: ofrecer una atención de calidad. Por ello, en esa búsqueda de opciones de mejorar es importante conocer las prácticas en un entorno en el que el envejecimiento, cronicidad y la innovación exponencialmente creciente requieren de una atención muy especial. La personalización y precisión de los diagnósticos y tratamientos y, en general, el carácter predictivo y la educación de la población junto a la promoción de los hábitos saludables son clave”, ha concluido.