Redacción
Los problemas bucodentales más frecuentes en jóvenes son la caries, las enfermedades de las encías como la gingivitis o periodontitis y las malposiciones dentarias. Estas enfermedades orales en la adolescencia se ven afectadas por hábitos perjudiciales como una higiene bucodental inadecuada, una mala alimentación, el consumo de tabaco o alcohol, el estrés, el uso de piercings orales y el mordisqueo de objetos.
En el marco del Día Internacional de la Juventud, celebrado el pasado 12 de agosto, la Dra. María Latorre, coordinadora médica en endodoncia y periodoncia de Donte Group, ha ofrecido algunas recomendaciones para cuidar la salud bucodental de los más jóvenes.
En primer lugar, señala que la estrategia más indicada para cuidar la salud oral de los más jóvenes es impulsar la creación de hábitos de higiene bucodental desde edades tempranas. “El ambiente familiar y el entorno escolar juegan un papel importante en la formación de hábitos orales saludables en los jóvenes. Algunos de estos son: el cepillado de dientes tres veces al día después de cada comida, la visita anual al dentista y la relación entre la salud tanto bucodental y una alimentación y estilo de vida saludable”, explica la Dra. María Latorre.
Además, destaca la importancia de seguir una dieta y alimentación saludables. La alimentación durante la adolescencia es un factor crucial que condiciona la salud general en la edad adulta. Una dieta saludable, con una distribución adecuada de alimentos a lo largo del día, y el consumo de frutas y verduras contribuyen a mantener una buena salud bucodental en la edad adulta.
El estrés y la ansiedad en los más jóvenes provoca falta de higiene oral, consumo excesivo de azúcares y la aparición de bruxismo
También recomienda evitar el consumo de tabaco o alcohol. Según algunos estudios, el 90 % de los fumadores comenzó el hábito antes de los 19 años. Eliminar el consumo de tabaco y alcohol en la adolescencia es fundamental, ya que pueden producir enfermedades bucodentales como las caries o la inflamación de las encías debido a que el tabaco reduce el efecto de autolimpieza de la saliva y el alcohol contiene grandes cantidades de azúcares.
Además, se refiere a la necesidad de manejar el estrés y la ansiedad. Los jóvenes a menudo se enfrentan a situaciones estresantes y de ansiedad relacionadas con diversos aspectos de su vida diaria. Estas emociones pueden provocar la falta de higiene oral, un aumento en el consumo de azúcares o la aparición de trastornos neuromusculares como el bruxismo. Es esencial que los jóvenes aprendan a manejar el estrés y adoptar hábitos saludables para mantener una sonrisa saludable. Por último, aconseja evitar prácticas mecánicas lesivas. Eliminar el uso de piercings orales y rehuir del mordisqueo de objetos puede prevenir problemas en la posición de los dientes y evitar posibles maloclusiones.
En los últimos años se ha experimentado un leve descenso de las enfermedades bucodentales en los más jóvenes debido a la educación y la concienciación en materia de salud oral. No obstante, las tasas de estas afecciones continúan siendo muy elevadas. “La prevención en la infancia y adolescencia es clave para mantener una sonrisa saludable en la edad adulta. Mediante la promoción de hábitos saludables y el apoyo de la familia y educadores, se puede lograr que los jóvenes tengan una salud bucodental óptima y prevengan enfermedades que puedan afectar a su adultez”, añade la Dra. María Latorre.