Dr. Daniel Torres: “La cirugía bucal ha avanzado mucho en el diagnóstico y tratamiento del cáncer oral”

Presidente de la Sociedad Española de Cirugía Bucal (Secib)

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Redacción
El presidente de la Sociedad Española de Cirugía Bucal (Secib), Daniel Torres, afirma que “la cirugía bucal ha avanzado mucho en el diagnóstico y tratamiento del cáncer oral y en técnicas de regeneración ósea”, a propósito del congreso nacional que se celebrará los próximos días 21-23 de septiembre en Córdoba y en los que se abordarán las novedades científicas y técnicas quirúrgicas de este tipo de enfermedades, entre otras.

Secib agrupa a 1.600 profesionales odontólogos con interés y práctica preferente en cirugía bucal. La cirugía bucal es la parte de la odontología que se encarga del tratamiento quirúrgico de la patología del aparato estomatognático, es decir el constituido por la boca, los dientes, las mandíbulas, la faringe y estructuras relacionadas que intervienen en los fenómenos de la masticación, deglución y el habla. Además, realiza actividades de prevención, diagnóstico y tratamiento relativas a las enfermedades del citado aparato.

Uno de los temas estrella del congreso es el diagnóstico y abordaje quirúrgico del cáncer oral. Según el Consejo General de Dentistas se diagnostican anualmente en España 8.200 casos de este tipo de cáncer a causa del cual mueren 1.500 personas. Esta alta mortalidad se debe a que solo se detectan de forma precoz el 25-30% de los casos. Con una detección temprana se aumentaría la tasa de supervivencia un 90%.

En España se diagnostican anualmente 8.200 casos de cáncer oral y 1.500 personas mueren por esta enfermedad

Aunque es frecuente en los hombres, crece su incidencia en las mujeres debido al tabaquismo. Con respecto a la edad, a pesar de ser un tumor cuya edad media de aparición está por encima de los 50 años, en los últimos años ha aumentado el número de casos en pacientes de 40 años y en menores de esa edad. Los principales factores de riesgo son el consumo de tabaco y alcohol (75%). Otras causas son la exposición prolongada al humo del tabaco ajeno; la infección por el virus del papiloma humano (VPH) o por el de Epstein-Barr; una mala higiene oral; una dieta deficiente en frutas y verduras y la exposición a ciertos químicos y sustancias tóxicas en el lugar de trabajo.

Se estima que hasta el 80% de nuevos casos de cáncer oral podrían evitarse si se eliminara el consumo de tabaco y se redujera la ingesta de alcohol, de tal forma que disminuiría el riesgo hasta un 35% a los 1-4 años de dejar de fumar y un 80% a los 20 años. Asimismo, el consumo adecuado de fruta y verdura se ha asociado con un descenso significativo del riesgo de desarrollo de cáncer oral. El diagnóstico precoz continúa siendo una labor esencial de los odontólogos en el manejo de los pacientes con cáncer oral, ya que aumenta significativamente las posibilidades de curación, evitando la necesidad de tratamientos radicales y mejorando la calidad de vida de los pacientes.

El diagnóstico precoz es una labor esencial de los odontólogos en el manejo de los pacientes con cáncer oral

“La cirugía permite erradicar en un buen número de casos el cáncer y en otros tenerlo bajo control junto con medidas terapéuticas complementarias. En el congreso vamos a tratar las prácticas que puede aportar la odontología al diagnóstico precoz y a la rehabilitación de este tipo de pacientes, que quedan mutilados de por vida. El papel del cirujano bucal y del odontólogo es fundamental para dotar a estos pacientes de una calidad de vida lo más aceptable posible”, señala el Dr. Torres.

Por otra parte, explica que “la cirugía bucal es un apartado dentro de la odontología y podemos distinguir distintas técnicas o áreas como pueden ser la patología de las inclusiones dentarias (cuando los dientes se desarrollan en el interior del hueso, de la mandíbula o el maxilar superior), las infecciones odontogénicas (las que afectan a la estructura del diente), la implantología, o los quistes y tumores de los maxilares”.

Dr. Torres: “En el congreso vamos a tratar las prácticas que puede aportar la odontología al diagnóstico precoz y a la rehabilitación de este tipo de pacientes”

El presidente del Secib subraya que “la influencia de la salud bucal en otras patologías sistémicas se conoce desde hace muchísimos años. Por desgracia, hay una corriente de trabajo en la cual solo relaciona con esas enfermedades sistémicas la periodontitis (inflamación de las encías), mediante evidencia de una limitada calidad, sin que se avancen en estudios que la contrasten. Avanzar hipótesis y relaciones de todo tipo, sin contrastar finalmente la hipótesis de causalidad, no permite a la ciencia establecer criterios. En nuestra área, por ejemplo, y avalados por múltiples estudios a lo largo de décadas, las infecciones odontogénicas pueden influir muchísimo en el rendimiento de deportistas, así como sabemos que el tabaquismo y el alcohol pueden influir en el desarrollo del cáncer oral”, detalla.

Enfermedades periimplantarias

Las enfermedades periimplantarias son frecuentes y en muchos aspectos aún desconocidas y con consecuencias nefastas para el éxito de la terapia de implantes. Este es otro de los asuntos que se tratarán en el XX congreso. La periimplantitis se produce cuando el implante comienza a perder su soporte óseo. Según un estudio de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA) al menos uno de cada cuatro pacientes que tienen un implante dental (un 24%) desarrollan periimplantitis a medio plazo (seguimiento medio de nueve años) y, si se le suma también la mucositis, esta cifra aún se incrementa más, de manera que más de un 50% de las personas que se someten a terapia de implantes dentales presentan alguna de estas dos enfermedades (periimplantitis o mucositis).

Los implantes dentales precisan una óptima higiene y requieren visitas de mantenimiento en la consulta dental

El Dr. Torres señala que, al igual que los dientes naturales, los implantes dentales precisan una óptima higiene y requieren visitas de mantenimiento en la consulta dental. “La presencia de estas infecciones amenaza seriamente la supervivencia del propio implante. El porcentaje de pacientes y de implantes que presentan pérdidas de hueso por encima del valor umbral de la enfermedad es altísimo“. El abordaje quirúrgico y terapéutico de esta situación consiste en realizar un trasplante del hueso del maxilar para dotarle de un soporte natural al implante (regeneración ósea).

España es uno de los países de Europa donde más implantes dentales se colocan. En concreto, dos de cada 10 personas de entre 25 y 79 años afirma llevar ya un implante dental. Las estimaciones más recientes indican que en nuestro país se colocan entre 1.200.000 y 1.400.000 implantes al año. Por ello, los profesionales del sector de la implantología dental y de la cirugía bucal insisten en que, a la hora de realizarse un tratamiento de manera segura, es necesario informarse bien y exigir referencias para evitar sufrir engaños o daños personales”.

La lucha contra estas enfermedades implantarías “debe comenzar por una correcta planificación terapéutica, seguida de una buena ejecución quirúrgica y prostodóntica y, por último, concienciando a los pacientes de la necesidad de un mantenimiento higiénico y periimplantario mantenido en el tiempo. Pero, además, son enfermedades infradiagnosticadas y se estima que más del 74% de los pacientes desconoce lo que es la enfermedad periimplantaria, por lo que la educación representa la primera línea en el enfoque preventivo”.

Dos de cada 10 personas de entre 25 y 79 años afirma llevar ya un implante dental

Osteonecrosis de los maxilares

Otro de los problemas crecientes en la población adulta es la osteonecrosis de los maxilares (cuando el hueso de la mandíbula queda expuesto y las células comienzan a morir por falta de sangre) producida por bisfosfonatos (ONMB), medicamentos que se recetan para el tratamiento de diversas patologías óseas como la osteoporosis de las mujeres posmenopáusicas.

La osteonecrosis maxilar secundaria a bisfosfonatos (ONMB), es un cuadro clínico de importante repercusión para el paciente y para el odontólogo. Su incidencia aumentará en los próximos años, debido al aumento del consumo de esta droga, así como otras que también se han relacionado con este efecto secundario. Las medidas preventivas y terapéuticas deben ser conocidas por los odontólogos y médicos especialistas que traten esta patología.

Se recomienda que cuando el médico tratante decide comenzar un tratamiento con estos fármacos, es fundamental que los pacientes sean derivados al odontólogo, para comenzar con el protocolo preventivo. Realizar un diagnóstico temprano de la ONMB puede evitar o reducir la morbilidad asociada a las lesiones destructivas del hueso. La profesión dental está ciertamente en una posición de privilegio, para prevenir y diagnosticar precozmente esta alteración.

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