Redacción
Idealmente deberíamos contar con un sistema sanitario global -público y privado, interconectado e interoperable- que permitiera que los datos de salud de una persona pudieran estar a su alcance independientemente de donde se hayan tomado o producido a lo largo de su vida. Sin embargo, a pesar de los avances tecnológicos disponibles, todavía existen fronteras y barreras entre la sanidad privada y la pública para llegar a una interconectividad e interoperabilidad real.
“Europa marcará el paso en los próximos años estableciendo directivas de obligatoria trasposición al ordenamiento jurídico y normativo de cada país en todo lo que tiene que ver con el paciente, el control de sus datos y la posibilidad de intercambiarlos para mejorar la prestación de la asistencia sanitaria. En este sentido, para seguir avanzando tiene que existir una acción colectiva, voluntad política y confianza de que esto se va a producir”.
Así lo ha asegurado Marta Villanueva, directora general del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS), en la mesa de Interoperabilidad, celebrada en el marco del IV simposio del Observatorio de la Sanidad y en la que también han participado Luisa Bautista Gómez, managing director del sector Salud de Accenture en España, Portugal e Israel; Pablo Rivero Corte, senior manager de Desarrollo de Negocio y Expansión de Sanidad de Minsait y Silvia Roldán, viceconsejera de Digitalización de la Comunidad de Madrid.
El Proyecto de Interoperabilidad de la historia clínica busca que el paciente pueda acceder digitalmente y compartir sus informes o pruebas con el profesional que desee
Asimismo, Villanueva ha añadido que “en la sanidad privada ya estamos en el camino de alcanzar una historia clínica digital única en este entorno. De hecho, el pasado mes de junio empezó a andar el Proyecto de Interoperabilidad de la historia clínica en la sanidad privada, una iniciativa llevada a cabo por la Fundación IDIS y a la que se han adherido inicialmente 15 entidades para poder compartir datos de la biografía clínica de los pacientes. No obstante, el objetivo es que se unan nuevos agentes del sector farmacéutico, extrahospitalario o sociosanitario, entre otros”.
El Proyecto de Interoperabilidad de la historia clínica en la sanidad privada es una iniciativa de carácter transversal que busca que el paciente, que es propietario de su historia de salud, pueda acceder digitalmente y compartir sus informes o pruebas con el profesional que desee en cualquiera de los centros que están integrados en el proyecto. Se trata de una iniciativa impulsada por la Fundación IDIS.
“El objetivo es crear un entorno en el que el paciente del sector sanitario privado pueda transitar por cualquier centro y territorio, acceder a su historia clínica y compartir la información con los profesionales sanitarios que considere según sus necesidades, siempre que la entidad esté adscrita al proyecto. Es importante resaltar que es información sensible, por lo que está garantizada la protección de datos del paciente, puesto que los datos “no viajan” sino que permanecen en el centro que los origina y es él propio paciente el que decide qué comparte, con quién y dónde”, ha puntualizado la directora general de la Fundación IDIS.
Según Villanueva, la llegada del EEDS facilitaría la colaboración público-privada y, por tanto, una mejora en la eficiencia y en la continuidad asistencial
Asimismo, durante su intervención señaló que esta plataforma abre el camino a la llegada del nuevo Espacio Europeo de Datos Sanitarios (EEDS). Este proyecto busca que cada ciudadano tenga pleno control de sus datos de salud de tal forma que estos se puedan facilitar voluntariamente, según el criterio personal. En este sentido, Villanueva, explicó que, si seguimos las directrices de la Unión Europea, será factible hablar de colaboración público-privada para que se compartan datos entre un lado y otro del sistema. “Si esta plataforma se hiciera una realidad a nivel global podríamos hablar de una mejora clara en la eficiencia, en la continuidad asistencial y en la experiencia del paciente, contar con más accesibilidad o reducir demoras o duplicidad de pruebas, entre otros aspectos”.
Cambios en la sanidad actual
En el marco de estas sesiones, también participó el presidente de la Fundación IDIS, Juan Abarca quien realizó un diagnóstico de los problemas que afectan a nuestro sistema sanitario. En este sentido, hizo hincapié en las graves dificultades de acceso al sistema por parte de los ciudadanos, a determinadas coberturas, innovaciones o medicamentos y a los serios problemas de equidad e insuficiencia en el número de profesionales, entre otros aspectos. La gobernanza del sistema, la suficiencia y eficiencia de los recursos, la colaboración entre titularidades y la digitalización son, como aseguró Abarca, elementos esenciales a tener en cuenta en el marco de las reformas necesarias.
Por su parte, el secretario general de la Fundación IDIS, Ángel de Benito, se encargó de moderar la mesa “Conversación a dos. Sector sanitario y social”. En ella explicó cómo está articulada la integración de la atención social y sanitaria en los pacientes mayores y la necesidad de adaptación a las necesidades poblacionales o de la atención a las personas mayores y/o dependientes en los centros especializados en su cuidado, entre otros aspectos.
La continuidad asistencial y la interoperabilidad con el entorno social asistencial son claves para lograr una mejor sanidad para todos
Durante su introducción, Ángel de Benito recalcó que es imprescindible contar con todos los actores del sector sanitario, entre los que se incluyen las farmacias o las residencias de mayores, para hacer realidad el reto de “una mejor sanidad para todos” que tiene la Fundación IDIS. Asimismo, durante la sesión se puso de manifiesto cómo la continuidad en la asistencia y la interoperabilidad con el entorno social asistencial son claves en el logro de ese reto. Globalmente, aseguraron, que es necesario implementar reformas en el modelo actual para dar cobertura a la demanda real de la población.
Para finalizar, la directora general de la Fundación IDIS defendió la normalización de la sanidad privada como “eje prioritario” para que la sanidad que tengamos “sea la sanidad que todos queremos”. En este contexto, aludió a la necesidad de que exista un pacto de Estado para empezar el plan de reformas que necesita el sistema para equilibrarlo, flexibilizarlo y adaptarlo a las necesidades reales de los pacientes y los profesionales, así como para contar con una sanidad colaborativa, con una buena gobernanza, mejor financiada y más eficiente centrada en el paciente, la sociedad en su conjunto (prevención) y el profesional sanitario, aprovechando las enormes oportunidades que nos ofrece la innovación digital. Por ejemplo, con iniciativas de gran valor añadido como la interoperabilidad que permite compartir datos mediante un uso primario (asistencial) o secundario (innovación, formación, gestión del sistema entre otros) y la imprescindible continuidad asistencial.
