Redacción
La salud mental se posiciona como el problema de salud más importante al que se enfrenta la gente en España por tercer año consecutivo. La preocupación por la salud mental ha ido en aumento desde la pandemia por Covid-19, aumentando 45 puntos porcentuales (del 16% al 61% actual). Este dato sitúa a España como el país de los 31 analizados, donde más ha aumentado la preocupación por la salud mental en los tres últimos años. Así lo ponen de manifiesto los estudios de Ipsos Global Health Service Monitor y Mental Health Day 2023, que la compañía ha compartido con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, que se celebra este 10 de octubre.
Además, España es el segundo país europeo más preocupado por la salud mental después de Suecia (67%), donde la preocupación por esta enfermedad siempre ha sido alta, incluso antes de la pandemia. De hecho, en 2018 el 59% de la población sueca ya señalaba la salud mental como uno de los principales problemas de salud a los que se enfrentaba el país.
La salud mental preocupa más a las mujeres que a los hombres en España, (67% de las mujeres así lo declaran frente a un 54% de los hombres). Por edades, también existen diferencias destacables. Los menores de 35 años son la franja a quienes más preocupa la salud mental con un 67%, frente a un 59% de las personas entre 35 y 49 años y un 57% entre los mayores de 50 años.
La salud mental se sitúa como el problema sanitario más importante en España por tercer año consecutivo, con una mayor preocupación por ella entre las mujeres y los menores de 35 años
El estudio Mental Health Day, llevado cabo en 31 países, persigue conocer cómo la gente percibe su salud mental, qué importancia tiene comparada con la salud física y cómo es abordada desde el sistema sanitario. Por su parte, el estudio mundial de Ipsos, Global Health Service Monitor 2023, muestra cómo la salud mental es el problema de salud más importante al que se enfrenta la población a nivel mundial, con una media del 44%. Un dato que crece 7 puntos desde el año pasado, y 18 desde la pandemia. Como consecuencia de ello, la salud mental ha desbancado al cáncer como la enfermedad que más preocupa a la ciudadanía mundial por primera vez desde que se realiza este estudio.
Atención desigual en el sistema sanitario
A pesar de que la gran mayoría de la población española (77%) considera que su salud mental es tan importante como su salud física, es cierto que se piensa menos a menudo en la primera que en la segunda. La gente tiende más a pensar en su salud física (74%) que en la mental (57%), y son las mujeres (63%) frente el 51% de los hombres, y los jóvenes, menores de 35 años (65%), frente a los mayores de 50 (49%), los más propensos a pensar en su salud mental. Esta tendencia también se percibe en el sistema sanitario, donde sólo el 23% de la población afirma que en España se trata por igual la salud mental y la física, siendo así el país europeo que más crítico es ese sentido, al mismo nivel que Bélgica.
España es uno de los países más críticos de Europa con su sistema de salud en cuanto a la gestión recibida en salud mental y física, ya que solo un 23% percibe que se tratan por igual
Aumenta el impacto del estrés y la depresión en la vida diaria
El estudio de Ipsos Global Health Service Monitor revela que el estrés es el tercer problema de salud más grave al que se enfrenta la población mundial, señalado por un 30%, de media, a nivel global, y un 33% por la población española. El estrés, al igual que la salud mental, ha ido aumentando tras la pandemia, 9 puntos a nivel global y 15 puntos en el caso de España.
Esta nueva investigación resalta el impacto que el estrés está teniendo en la vida diaria, donde la mitad de la población española (52%) afirma haber experimentado periodos de estrés durante el último año en los que no pudieron hacer frente a la situación. Además, un 40% se ha sentido deprimido hasta el punto de sentirse triste o desesperanzado y un 33% declara haberse ausentado del trabajo por estrés en los últimos doce meses.
Por edades, los menores de 35 años también son los que más preocupación muestran por el estrés, con un 36% y según se va incrementando la edad va bajando: 33% entre 25 y 49 años y 30% entre los mayores de 50 años. Asimismo, en este caso no hay diferencias significativas de género. A nivel europeo, Suiza (39%), Suecia (38%), Polonia (37%) y Francia (36%) son los países más preocupados y Reino Unido (15%) e Irlanda (18%) los que menos.