Silvia Padi: “Una de las necesidades más imperantes es el abordaje temprano del dolor para evitar su cronificación”

La directora de Marketing en Zambon Iberia señala que la inteligencia artificial puede ser una aliada para facilitar el diagnóstico

Silvia-Padi

J.P.R.
Un abordaje temprano del dolor agudo se ha convertido en una de las principales necesidades médicas no cubiertas. La directora de Marketing de Zambon Iberia, Silvia Padi, insiste en que resulta clave para evitar una cronificación que tiene un impacto significativo en la calidad de vida del paciente y en el sistema sanitario. Así lo pone de manifiesto en esta entrevista con iSanidad con motivo del Día Mundial del Dolor que se celebra el 17 de octubre.

En los últimos años ha crecido la necesidad de tratar el dolor desde el punto de vista médico, ¿cómo ha impactado en el uso de estos medicamentos?
En los últimos años se ha optimizado el tratamiento del dolor gracias a la investigación y a la concienciación y sensibilización de la importancia de tratarlo. El dolor, sobre todo agudo, es uno de los motivos más frecuentes tras las consultas de salud. La sociedad es más consciente de la importancia del tratamiento del dolor. Esto ha hecho que en los últimos años haya crecido también su importancia en la práctica clínica y haya aumentado el consumo de tratamientos farmacológicos para abordar el dolor. Esto supone, en sí mismo, una primera evolución en el abordaje del dolor, puesto que en el pasado los españoles consideraban que no recibían el tratamiento adecuado y que el tiempo medio en conseguirlo era muy elevado.

“La sociedad es más consciente de la importancia del tratamiento del dolor. Esto ha hecho que en los últimos años haya crecido también su importancia en la práctica clínica”, explica Silvia Padi

El principal tipo de tratamiento recomendado para el dolor agudo, y por ello también los que han experimentado un aumento en su consumo, son los AINE (antiinflamatorios no esteroideos), entre otros factores, por su papel para hacer frente al dolor leve a moderado. Según la Aemps, entre los antiinflamatorios en la primera línea para el dolor agudo, el más utilizado en España es el ibuprofeno, que además es el mejor tolerado de su clase. El papel de este antiinflamatorio en el tratamiento del dolor ha llevado, por ejemplo, al desarrollo de fórmulas optimizadas como la combinación de ibuprofeno con arginina que hemos impulsado desde Zambon, con el objetivo de acelerar la velocidad de absorción en comparación con el ibuprofeno solo o convencional, importante para el abordaje del dolor en donde el inicio rápido de la analgesia es requerido.

¿Dónde se encuentran las principales necesidades no cubiertas de los pacientes con dolor en la actualidad?
Una de las necesidades más imperantes es el abordaje temprano del dolor. Todos somos susceptibles a experimentar episodios de dolor. Es más, se estima que el 80% de la población mundial tendrá algún episodio de dolor agudo a lo largo de su vida. Pero, pese a tratarse de una realidad muy frecuente, todavía hay puntos a mejorar como el tiempo de espera hasta conseguir un tratamiento adecuado o hasta dar con un diagnóstico certero sobre la procedencia del dolor, especialmente cuando éste se prolonga en el tiempo y se cronifica.

“Es fundamental prestar atención a esta necesidad por cubrir y tratar el dolor cuando todavía está en sus fases agudas para prevenir su recurrencia y/o cronificación”

Precisamente, es fundamental prestar atención a esta necesidad por cubrir y tratar el dolor cuando todavía está en sus fases agudas para prevenir su recurrencia y/o cronificación, porque las consecuencias de que esto suceda son muchas, tanto médicas como emocionales o también económicas. Por ejemplo, la cronificación del dolor, además de impactar en la calidad de vida de los pacientes y sus entornos, multiplica el número de visitas al sistema de salud, las intervenciones o terapias recomendadas, los desplazamientos de pacientes… Y no olvidemos los costes indirectos derivados de su impacto psicológico o el absentismo laboral que genera. Todo ello podría revertirse poniendo foco en el dolor en sus fases agudas.

Entre otros grandes retos podríamos comentar la necesidad de promover un abordaje multimodal y multidisciplinar del dolor, de modo que no solo pueda gestionarse de manera individual en el paciente desde cada nivel asistencial, sino para que también se pueda mitigar su impacto a través de estrategias poblacionales que promuevan el manejo del dolor antes de su cronificación. Del mismo modo existen otras necesidades, como impulsar la educación del paciente para que pueda tener un papel activo en el manejo de su dolor, en el seguimiento adecuado del tratamiento farmacológico y en buenos hábitos de vida.

No obstante, la prevención del dolor es un aspecto fundamental y la educación sobre el autocuidado y la prevención de lesiones puede ser fundamental. Además, la necesidad de fármacos seguros y efectivos para el dolor pueden contribuir a una mejor recuperación del paciente, así como una atención médica adecuada que permita diagnosticar y tratar las distintas causas del dolor.

“Entre otros grandes retos podríamos comentar la necesidad de promover un abordaje multimodal y multidisciplinar del dolor”, relata Silvia Padi

¿Qué tipos de dolor llevan al paciente con más frecuencia a la consulta médica o a la farmacia?
El dolor es un elemento prioritario y transversal en el marco de las estrategias y políticas de salud del SNS. Entre los casos de dolor agudo, la lumbalgia es, sin duda, uno de los dolores agudos más comunes en las consultas médicas y supone por sí solo el 30% del dolor agudo, seguido de otros tipos de dolor como la gonalgia, la cefalea o el dolor cervical. El dolor de espalda también es el que genera el mayor impacto en el sistema de salud y laboral, porque, por ejemplo, es la causa más frecuente de incapacidad laboral en España en adultos menores de 50 años, algo que también afecta económicamente por generar un coste de 2.500 millones de euros en el mercado laboral.

A nivel de la oficina de farmacia, los dolores más frecuentes de consulta son los dolores de espalda, articulares, menstruales, dentales, las cefaleas y los dolores de oído y garganta.

¿Cómo va a cambiar el abordaje del dolor en los próximos años?
El ámbito del dolor está en constante evolución, no únicamente en el ámbito de la investigación, sino de la propia población que tiene una mayor conciencia sobre la importancia de abordar el dolor en los primeros estadios y teniendo en cuenta tratamientos seguros y eficaces.

“La inteligencia artificial se está convirtiendo en uno de los grandes ejes de evolución sanitaria del futuro”

En los próximos años debemos impulsar el área del dolor y su abordaje: promover la innovación en terapias existentes y nuevas, concienciar a la sociedad sobre la importancia de tratar el dolor en su fase aguda y colaborar con profesionales para avanzar en buenas prácticas para su manejo. Por ejemplo, esperamos ver cada vez más unidades multidisciplinares que faciliten el abordaje del dolor de manera multidimensional, de modo que la terapia farmacológica pueda complementarse con otros tratamientos y se mejore la calidad de vida del paciente.

¿Cómo va a cambiar la inteligencia artificial la identificación de nuevos compuestos en el área de dolor?
Sin duda, la inteligencia artificial se está convirtiendo en uno de los grandes ejes de evolución sanitaria del futuro, tanto en lo referido a la atención al paciente como en el desarrollo de fármacos. En el caso del dolor, como en muchas áreas terapéuticas, la IA puede ser una aliada para facilitar el diagnóstico, mejorando las posibilidades de éxito al disminuir los tiempos y con ello los costes, permitir el desarrollo de una medicina personalizada, a favorecer el acercamiento al profesional sanitario…

Esta tecnología podrá ayudarnos agilizando el acceso a datos biométricos de los pacientes, algo que en el campo del dolor puede ser interesante. Todo este manejo de datos personales requerirá regulaciones para garantizar la seguridad de los datos y, por supuesto, contará con la supervisión de la comunidad investigadora, pero es sin duda un área de desarrollo que puede ayudar a dar con nuevas soluciones para el dolor y mejorar la vida del paciente, que es uno de los objetivos principales de Zambon.

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