Redacción
El receptor nuclear NOR-1 es clave en la regulación de la calcificación de las válvulas aórticas y la calcificación asociada a la aterosclerosis. Así lo revela una investigación del Ciber de Enfermedades Cardiovasculares publicada en el la revista Translational Research. “Hasta ahora conocíamos el papel de NOR-1 en el remodelado cardiaco y de los vasos sanguíneos, pero no se había establecido su relación con la calcificación en estos tejidos”, explica el Dr. José Martínez-González, investigador del Instituto de Investigaciones Biomédicas de Barcelona IIBB-CSIC y el Instituto de Investigación Sant Pau, que ha liderado la investigación junto a la Dra. Cristina Rodríguez Sinovas, investigadora del Instituto de Investigación Sant Pau.
Los receptores nucleares son un tipo de proteína que hacen de reguladores trascripcionales de diferentes genes involucrados en importantes funciones fisiológicas. Los investigadores han analizado válvulas y células vasculares humanas y han hecho lo mismo en un modelo de ratón modificado genéticamente con niveles elevados de NOR-1 en la pared vascular. Estos ratones mostraron una reducción en el desarrollo de aterosclerosis, menor expresión vascular de marcadores osteogénicos, y, específicamente, una menor calcificación vascular.
Dra. Rodríguez Sinovas: “NOR-1 limita la calcificación cardiovascular, un proceso complejo, parcialmente caracterizado, que constituye un grave problema de salud pública”
“NOR-1 limita la calcificación cardiovascular, un proceso complejo, parcialmente caracterizado, que constituye un grave problema de salud pública. Nuestros análisis en muestras humanas de válvulas aórticas y lesiones ateroscleróticas calcificadas, estudios en células valvulares y vasculares y estrategias in vivo, demuestran la participación de NOR-1 en la regulación de la compleja red de genes que contribuyen a la calcificación cardiovascular“, apunta la Dra. Rodríguez Sinovas.
Observaron que las células responsables de la deposición de calcio en las válvulas aórticas y las células musculares lisas en las arterias aumentan el nivel de NOR-1 cuando se induce calcificación. “Cuando aumentamos o disminuimos el nivel de NOR-1 en estas células vimos cambios significativos en genes relacionados con la calcificacion”.
Dra. Carmen Ballester: “Nuestros datos indican que NOR-1 tiene un efecto negativo en la expresión de genes relacionados con la calcificación. Esto podría tener implicaciones importantes para el tratamiento de enfermedades cardiovasculares”
Hasta hace poco se consideraba a la calcificación vascular como un proceso pasivo y degenerativo asociado a la edad avanzada, a la aterosclerosis, a diversas alteraciones metabólicas como la diabetes mellitus, o a enfermedades genéticas raras. Sin embargo, desde hace algunos años es considerada un proceso activo y regulado de manera semejante a la mineralización y metabolismo del hueso.
“Nuestros datos indican que NOR-1 tiene un efecto negativo en la expresión de genes relacionados con la calcificación tanto en las células de las válvulas cardíacas como de las arterias, y previene la calcificación en el sistema cardiovascular. Esto podría tener implicaciones importantes para el tratamiento de enfermedades cardiovasculares”, añade la Dra. Carme Ballester, primera autora del estudio.
Hasta hace poco se consideraba a la calcificación vascular como un proceso pasivo y degenerativo. Ahora se sabe que es un proceso activo y regulado de manera semejante a la mineralización y metabolismo del hueso
“Los resultados permiten mejorar nuestro conocimiento de los procesos que conducen a la mineralización ectópica y allanan el camino para futuros estudios que abrirán nuevas oportunidades terapéuticas en la lucha contra la calcificación cardiovascular“ concluye el equipo, en el que también han colaborado investigadores liderados por el Dr. Francisco Marín, del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca.
