Cristina Cebrián
El aumento de problemas de salud mental entre la población ya es una realidad que requiere de más investigación y conocimiento. Como expertas en cuidados, las enfermeras especialistas en salud mental pueden aportar iniciativas valiosas en materia de prevención, mejora de calidad de vida y lucha contra el estigma social. Para ello, es imprescindible que se basen en la evidencia científica. Así lo cuenta la enfermera Mercedes Peña, supervisora de Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón de Madrid y vocal suplente de Salud Mental del Consejo General de Enfermería (CGE). En este hospital cuentan con un grupo de investigación formado por enfermeras, especialistas y no especialistas en salud mental. Uno de sus mayores logros ha sido el proyecto STOP sujeciones, con el que han logrado disminuir y controlar las sujeciones en pacientes con trastorno mental.
¿Son conscientes las enfermeras especializadas en salud mental de la importancia que tiene la investigación en este ámbito?
Las enfermeras de salud mental son muy conscientes de la importancia de la investigación. De hecho, para poder trabajar como enfermera especialista en salud mental, además del EIR, hay que presentar un proyecto de investigación. No se puede trabajar sin la evidencia científica, porque es la que marca nuestros cuidados enfermeros.
Hemos luchado mucho por tener un departamento de investigación multidisciplinar donde, por supuesto, participan las enfermeras en estudios cualitativos y cuantitativos
En el Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Gregorio Marañón todas las enfermeras que terminan su EIR tienen que hacer un trabajo de investigación. Es más, hemos luchado mucho por tener un departamento de investigación multidisciplinar donde, por supuesto, participan las enfermeras en estudios cualitativos y cuantitativos. Tenemos un grupo de enfermería en investigación formado por enfermeras, especialistas y no especialistas, y de otras ramas de psiquiatría que trabajan en salud mental.
¿Qué líneas de investigación enfermera en salud mental son las más relevantes en la actualidad?
Sobre todo se dirigen al paciente vulnerable. Nuestro paciente tiene muchos problemas sociales, hay mucho estigma en la sociedad, tiene problemas no solamente para limitar su enfermedad, para entrar en rehabilitación o para prevenirla, sino también para reinsertarse en la sociedad. Por ahí van nuestras nuestras vías de investigación principales. Después hay otras líneas de investigación sobre autismo, suicidio, trastornos de conducta alimentaria, autolesiones en la adolescencia, etc. Algo muy importante que hacemos es que todo lo contrastamos con el usuario, no solamente con el paciente, sino también con las asociaciones de pacientes con los que trabajamos normalmente. Muchas veces, tenemos una óptica asistencial, preventiva, de rehabilitación y, en ocasiones, nos dicen cosas que nos sorprenden.
Uno de los trabajos más importantes que tenemos en nuestro centro es el grupo de trabajo STOP Sujeciones. Su objetivo es eliminar las sujeciones físicas de los pacientes con trastornos mentales, controlar las que existen y ver qué errores se cometen. Desde que se puso en marcha, hemos conseguido disminuir el número y la duración de estas sujeciones, que no solo se producen en psiquiatría. Ahora estamos contrastando, de manera cualitativa, qué siente el paciente ante la eliminación de las sujeciones y si lo considera oportuno. También desarrollamos formación para el personal sanitario para que sean conscientes de lo que implica una sujeción y las alternativas que existen. No se pueden utilizar de manera indiscriminada y sin antes agotar todas las posibilidades de alternativa.
A nadie nos gustan las enfermedades pero no podemos hacer juicios de valor sobre los enfermos mentales. Hay que trabajar ese estigma social con la población
¿Cómo obtienen financiación para que las enfermeras puedan desarrollar sus trabajos de investigación en salud mental?
Nosotros conseguimos financiación a partir de las becas que se proponen. Dentro del Instituto de Psiquiatría y Salud Mental, tenemos un departamento de investigación que nos apoya pero, cuando necesitamos liberar a varias enfermeras para realizar el proyecto, hay que pedir una financiación que sea interna o externa. Entonces la pedimos, a veces la ganamos y a veces no la ganamos.
Este año, el premio de investigación del CGE en la categoría de Innovación se concedió a la enfermera Marta Llorente por su trabajo “Psyapp, validación y desarrollo de una aplicación móvil para la gestión eficaz de la salud en enfermos mentales”. ¿Qué importancia tienen las nuevas tecnologías en el abordaje de estos pacientes?
Las nuevas tecnologías en salud mental tienen una parte positiva y otra negativa. Desde enfermería hemos realizado investigaciones para comprobar si realmente los pacientes de psiquiatría utilizaban las nuevas tecnologías y sí que las utilizan. En este sentido, son muy positivas porque permiten hacer mucha prevención, por ejemplo en el ámbito de los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA). Sin embargo, a veces se difunden contenidos que no son nada positivos, de gran melancolía, tristeza y agotamiento de la existencia, que pueden dar ideas de suicidio.
Los estigmas en torno a los trastornos mentales están muy presentes en nuestra sociedad, ¿se necesita más investigación y conocimiento en este sentido para favorecer la integración de estos pacientes en la sociedad?
Necesitamos una posibilidad de poder reinsertar a nuestros pacientes sin estigma, que tengan acceso al mundo laboral, a la escuela, a la universidad. Que tengan los mismos derechos que tiene un paciente ajeno a la salud mental. Para ello, hay que trabajar ese estigma con la población en general. A nadie nos gustan las enfermedades, pero no podemos hacer juicios de valor sobre los enfermos mentales. Esto lo estamos viendo entre los escolares que nos visitan para conocer el hospital, vienen con miedos y eso es en lo que tenemos que trabajar. Tenemos que olvidarnos de esa visión de que el enfermo mental es “un loco”. Igual que enfermamos del cuerpo, enfermamos de la mente.