Redacción
“Voy a llevar a cabo mi mandato en los próximos años desde la ética”. En su primer acto público desde la toma de posesión, la nueva minstra de Sanidad, Mónica García, ha dejado esta declaración de intencones durante la 32 reunión de los Consejos Nacionales de Ética. “El dolor y sufrimiento derivados de no reconocer la dignidad en todos los seres humanos ha de ser una de las cosas que nos muevan para mejorar nuestras sociedades y, más concretamente, la salud de nuestra gente”, ha añadido.
Durante su intervención ha ahondado en los principios de legalidad y de ética. En este punto se ha referido a una de las participantes en estas jornadas, Adela Cortina, recordando que “las medidas legales son necesarias, pero sin personas convencidas de que cualquier ser humano es digno de todo respeto, sin gentes conscientes de que ellas mismas tampoco se merecen la indignidad de mentir y calumniar, seguiremos teniendo un mundo muy caro en dolor y en sufrimiento”. Por eso, ha abogado por reconocer la dignidad en todos los seres humanos “para mejorar nuestras sociedades y, más concretamente, la salud de nuestra gente”.
García ha destacado que la ética debe regir entre los líderes políticos. “Debe ayudar a los gobernantes a tener altura de miras para llegar a acuerdos que partan del reconocimiento del resto de actores como interlocutores válidos y que pongan el bienestar de nuestras sociedades por encima de las batallas cortoplacistas de los partidos”.
“Voy a llevar a cabo mi mandato en los próximos años desde la ética”, ha asegurado Mónica García en su primer acto público
Desde el principio de su mandato, la salud mental ha estado muy presente en todos sus discursos. También esta ocasión. “No podemos afrontar retos como el del crecimiento de los problemas de salud mental cavando trincheras, sino tendiendo puentes, construyendo herramientas de deliberación para tomar medidas que mejoren las vidas de la gente, que las doten de unas condiciones de vida que las mejoren y que les resten dolor y sufrimiento”, ha enfatizado.
De fondo, ha incluido una crítica velada a los recortes sanitarios y al Real Decreto 16/2012. “En este país ha habido épocas en las que se han llevado a cabo políticas a sabiendas de que habría gente que las sufriría en sus propias carnes. Se ha amputado la universalidad del sistema sanitario, se han implantado copagos de medicamentos en población pensionista, se han deteriorado los servicios sanitarios incrementando las listas de espera”, ha recordado, y “todo ello a sabiendas de que supondría infligir un daño en la salud de muchas personas”.
Y, en tercer lugar, ha afirmado que “si algo caracteriza a la ética en el ámbito de la salud, y debe también caracterizar a la política en este mismo ámbito, es la necesidad de guiarse por un fuerte principio de justicia”. Por eso, ha recordado que los sistemas sanitarios públicos han de ser garantes de la igualdad de oportunidades y de la capacidad de los individuos de poder tener varias oportunidades si las necesitan.