Las presuntas negligencias médicas se cobraron la vida de 602 pacientes en 2023, 97 menos que el año anterior (-13,9%), según la última memoria anual del Defensor del Paciente. En total, 12.071 casos recibidos (1.540 menos que en 2022). La mala praxis más común fue el error de diagnóstico y la pérdida de oportunidad terapéutica. También se notificaron por otras causas como intervenciones mal realizadas; altas precipitadas; atención deficiente; infecciones hospitalarias o retrasos en ambulancias, entre otras.
En otros términos, esto supuso una media de 33 casos al día de mala praxis médica. Por especialidades y procesos, se recibieron un total de 286 casos de personas que se sometieron a una intervención de cirugía plástica, reparadora y estética con resultado insatisfactorio, 47 casos menos que el año pasado. Ante tal magnitud, desde el Defensor del Paciente abogan por estudiar una fórmula piden estudiar la fórmula para que, antes de llevar a cabo este tipo de intervenciones, exista una coordinación entre el servicio de cirugía plástica y el servicio de salud mental, con el objeto de evaluar y así descartar a personas con algún trastorno de este tipo mediante un estudio psicológico.
Por otra parte, también se contabilizaron 22 fallecidos en casos en los que, tras avisar al 112, o bien no se envió una ambulancia al domicilio para trasladar al enfermo a un hospital, o bien en esos casos la respuesta fue tardía, con más de una hora de retraso. Además, se han denunciado un total de 101 casos de estado de discapacidad en pacientes después de intervención quirúrgica, quedando en estado de tetraplejia o paraplejia. Este dato supone 26 casos menos contabilizados con respecto a 2022.
Asimismo, 26 pacientes fallecieron por infección hospitalaria debido a que el hospital no cumplió las medidas de asepsia necesarias. “Este es un número ínfimo al real, ya que en España al año fallecen más personas por infecciones hospitalarias que por accidentes de tráfico”, han aclarado desde la asociación.
Otras denuncias registradas hacen referencia a los casos de contagio por hepatitis C, por ejemplo tras realizar trasfusiones de sangre (25) o de hasta 216 personas que aseguraron haber sido dadas de alta sin estar “en condiciones óptimas” de poder ir a trabajar.
De mayor a menor, las comunidades autónomas con más denuncias acumuladas por negligencias médicas fueron Madrid (3.118 casos); Andalucía (2.289 Casos); Cataluña (1.406 casos); Comunidad Valenciana (846 casos); Castilla y León (714 casos); Galicia (651 casos), Castilla-La Mancha (638 Casos); País Vasco (410 Casos); Murcia (403 casos) y Aragón (331 casos).
Mala praxis en Urgencias
Urgencias fue una de las áreas con más denuncias acumuladas en todas las autonomías. Son servicios, apunta la memoria anual, con deficiencias similares durante repetidas etapas del año: pacientes hacinados por falta de espacio, insuficiente número de camas, horas de espera hasta recibir asistencia, colapso, etc.
Entre los principales se encuentran el Hospital Universitario La Paz (Madrid); el Complejo Hospitalario Universitario Insular (Las Palmas de G.C.); el Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza); el Hospital Universitari Son Espases (Palma de Mallorca); el Complejo Hospitalario Regional Virgen del Rocío (Sevilla) o el Hospital Universitari Vall d’Hebron (Barcelona), entre otros.
Las listas de espera
Otro motivo que acumula un gran número de denuncias por negligencias médicas son las listas de espera. “Las demoras en cualquier tipo de servicio son el principal motivo de queja y en salud suponen un drama para cientos de miles de personas. Son sinónimo de injusticia e inequidad”, ha apuntado el Defensor del Paciente, que denuncia un recuento “totalmente irreal” de estas listas. Este debería hacerse, proponen, sumando el tiempo desde que el afectado va a la primera consulta y es operado.
Negligencias en los partos
Por otro lado, 105 bebés nacieron con alguna discapacidad relacionada con partos llevados de forma inadecuada o con fórceps, causando secuelas como sufrimiento fetal, parálisis cerebral o braquial, etc. Ello supone 38 casos menos respecto al año anterior.
“Lo peor de este apartado es que, en numerosos de estos casos, los ginecólogos no informan a los padres durante el embarazo de las malformaciones del feto y luego muchos bebés fallecen a las pocas horas de nacer por ser incompatibles con la vida”, han lamentado desde la asociación.
