Redacción
Este 4 de febrero se ha conmemorado el Día Mundial contra el Cáncer. Desde el Consejo General de Dentistas han recordado la importancia de la prevención, la detección precoz y un tratamiento personalizado para mejorar el pronóstico de esta enfermedad. El presidente del Consejo General de Dentistas, el Dr. Óscar Castro ha recordado que el tabaquismo, el consumo no moderado de alcohol y las infecciones virales como el virus del papiloma humano (VPH), son los principales factores de riesgo del cáncer oral.
“Al menos, el 75% de los pacientes diagnosticados a partir de los 50 años, han sido consumidores de tabaco. Cuando se combina el tabaco con el consumo excesivo de alcohol, el riesgo aumenta significativamente, ya que los dos actúan sinérgicamente. Aquellos que fuman y beben, tienen un riesgo 15 veces mayor de desarrollar cáncer oral”, ha advertido. Además, existen otros factores de riesgo, como prótesis dentales mal ajustadas y que causan heridas, la exposición excesiva y sin protección a la radiación ultravioleta o una mala alimentación.
Según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), se estima que para 2024 se diagnosticarán 7.603 casos de cáncer oral y faringe. Se trata de una enfermedad con alta mortalidad, en gran parte debido a su diagnóstico tardío, pues un 75% de estos tumores son detectados en etapas avanzadas. Hoy se sabe que la demora en pedir consulta profesional alarga un 40% el tiempo hasta que se recibe el tratamiento. Por este motivo, el cáncer oral causa alrededor de 1.500 muertes al año, más que los accidentes de tráfico.
El dentista no solo es fundamental en el diagnóstico del cáncer oral, también tiene un papel clave antes, durante y después de cualquier tratamiento oncológico
El presidente del Consejo General de Dentistas, ha asegurado que las cifras de mortalidad por esta patología podrían reducirse si se detectara a tiempo, elevando la tasa de supervivencia un 90%. “Sabemos que es una enfermedad que afecta a hombres y mujeres mayores de 45 años, aunque principalmente a los hombres. Por eso es necesario que la población acuda una vez al año a revisión odontológica o siempre que se aprecie alguna anomalía en la cavidad oral, pues el dentista podrá diagnosticar cualquier lesión potencialmente maligna”.
Uno de los peligros reales de este cáncer es que, en sus primeras etapas, puede pasar desapercibido, por lo que hay que estar atentos a los siguientes signos: una mancha de color blanco o rojo en la boca, o una pequeña úlcera dura que se parece a un afta común y que no se cura en unas dos semanas; dolor o dificultad para tragar, hablar o masticar; el dolor de oído persistente en un solo lado también puede ser una señal de advertencia. “No significa que estos signos siempre sean sinónimo de cáncer oral, pero es recomendable acudir a un dentista para salir de dudas”, ha aconsejado el Dr. Castro.
Además de diagnosticar el cáncer oral, el dentista es un facultativo clave antes, durante y después del tratamiento oncológico de otros tumores. Esto se debe a que la quimioterapia y la radioterapia pueden tener importantes efectos secundarios en la salud bucodental de los pacientes: mucositis oral, xerostomía, infecciones orales y sangrado.
Es recomendable realizar una evaluación odontológica del paciente para abordar cualquier problema existente antes de comenzar el tratamiento oncológico
“Antes de comenzar el tratamiento oncológico, es recomendable realizar una evaluación odontológica del paciente para abordar cualquier problema existente. Además, las visitas regulares al dentista durante y después del tratamiento son esenciales. El dentista podrá prescribir los medicamentos e indicar las pautas necesarias para controlar los efectos secundarios que la quimioterapia y la radioterapia provocan en la cavidad oral, mejorando la calidad de vida del paciente”, ha señalado el Dr. Castro.
Por último, presidente del Consejo General de Dentistas ha insistido en que “es fundamental que los pacientes oncológicos se comuniquen con su equipo médico y su dentista para recibir orientación específica sobre cómo manejar los efectos secundarios bucodentales y garantizar una atención integral durante el tratamiento”.
Papel de la ortodoncia en la lucha contra el cáncer
Por su parte, la Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial (Sedo) ha subrayado que la “investigación y la colaboración entre ortodoncistas, oncólogos y otros especialistas médicos es esencial para diseñar tratamientos ortodónticos personalizados que se adapten a las necesidades específicas de estos pacientes”.
En este sentido, el presidente de la Sedo, el Dr. Juan Carlos Pérez Varela, reconoce “la importancia de la investigación y los avances en ortodoncia para mejorar la calidad de vida de los pacientes que luchan contra el cáncer”. El tratamiento contra el cáncer, especialmente cuando involucra la cabeza y el cuello, puede tener efectos significativos en la cavidad oral y la alineación de los dientes. Estos cambios pueden impactar no solo la estética dental, sino también la funcionalidad y la calidad de vida del paciente. La ortodoncia, por lo tanto, juega un papel crucial en la rehabilitación y recuperación de estos pacientes.
El tratamiento contra el cáncer, especialmente cuando involucra la cabeza y el cuello, puede tener efectos significativos en la cavidad oral y la alineación de los dientes
La Sedo destaca la importancia de una atención integral en la que los ortodoncistas colaboran estrechamente con oncólogos y otros especialistas médicos. Esta colaboración es esencial para diseñar tratamientos ortodónticos personalizados que se adapten a las necesidades específicas de los pacientes con cáncer. Estos tratamientos pueden incluir la corrección de desalineaciones dentales causadas por la cirugía oncológica, la mejora de la mordida para facilitar la masticación y la deglución, y el uso de aparatos ortopédicos para mitigar los efectos secundarios de los tratamientos oncológicos.
La salud bucodental, crucial en la detección temprana de varias formas de cáncer
El Ilustre Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de Asturias (Codes), ha resaltado que “la salud bucodental es un componente crucial en la detección temprana de varias formas de cáncer, especialmente aquellos que afectan la cavidad oral, la cabeza y el cuello“. Los dentistas, como primeros observadores de cambios anormales en la boca, juegan un papel vital en la identificación temprana de signos potenciales de cáncer, lo que puede resultar en un diagnóstico y tratamiento más oportunos y eficaces.
Así, el Coces ha recalcado la importancia de las visitas regulares al dentista no solo para el mantenimiento de la salud bucodental, sino también como una medida preventiva contra el cáncer. Durante los exámenes de rutina, los odontólogos pueden detectar lesiones o anomalías que podrían ser indicativas de cáncer, permitiendo así una intervención precoz