Pablo Malo Segura
Cardia by Apolo es la primera tecnología mundial que genera, gracias a la inteligencia artificial (IA), la reconstrucción 3D del corazón de forma automática a partir de la información 2D extraída de un ecocardiograma estándar. El proyecto cuenta con un equipo de 20 personas, especialistas en biomedicina y computación y el asesoramiento de reputados cardiólogos. Actualmente, se encuentra en fase de desarrollo y validación médica y la previsión es que se pueda comercializar en 2025. Daniel Ferrer, fundador y CEO de Cardia by Apolo, destaca en una entrevista con iSanidad que esta tecnología permite un “diagnóstico más rápido y preciso” en cardiología y “rebaja el coste económico para el sistema sanitario”.
El proyecto es el primero que impulsa Apolo AI, compañía española especializada en el desarrollo de herramientas a través de modelos de IA aplicables a distintos ámbitos de la salud
¿Cuál es el objetivo de la tecnología Cardia by Apolo?
Nuestro principal objetivo con esta tecnología es impulsar el diagnóstico médico en el ámbito cardiológico a través del reconocimiento de imágenes con inteligencia artificial. Esto nos permite contribuir a la detección de posibles problemas con mayor velocidad, facilitando el cribado de pacientes y derivando a los especialistas a aquellos con patologías concretas, rebajando, además, el coste económico para el sistema sanitario.
“El objetivo de Cardia by Apolo es impulsar el diagnóstico médico en el ámbito cardiológico a través del reconocimiento de imágenes con inteligencia artificial”
¿Qué beneficios puede aportar para pacientes, profesionales, hospitales y el sistema sanitario en su conjunto?
El resultado de todo el proceso para el paciente es un diagnóstico más rápido y preciso. Para los centros hospitalarios y responsables del sistema sanitario, Cardia es una herramienta que añade eficacia al análisis y eficiencia al diagnóstico, gracias a la automatización del análisis y a la información 3D adicional. Así, conseguimos optimizar los recursos y reducir la necesidad de pruebas sucesivas, generando ahorro y alivio a las largas listas de espera.
¿De qué forma funciona Cardia y cómo surge la idea de crear esta tecnología en imagen médica?
La idea surge principalmente cuando veo la cantidad de cuellos de botella que se crean en los hospitales y las largas listas de espera. No podemos olvidar que las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y sus últimos datos revelan que se producen casi 19 millones de muertes en todo el mundo al año.
“Cardia añade eficacia al análisis y eficiencia al diagnóstico, gracias a la automatización del análisis y a la información 3D adicional”
En este momento ya contamos con una cantidad suficiente de datos disponibles para analizar, técnicas avanzadas basadas en inteligencia artificial y capacidad de computación para hacerlo. Además, asistimos a un envejecimiento de la población y un aumento de la presión para la sostenibilidad del sistema de salud.
De manera que si conseguíamos que el ecocardiograma, conectado a nuestra inteligencia artificial analizase rápidamente el estado del corazón del paciente, reduciríamos considerablemente los tiempos de actuación y un aumento de la eficiencia. El proceso consiste en la reconstrucción 3D del corazón de forma automática a partir de la información 2D extraída de un ecocardiograma estándar. Este modelo 3D permite un análisis de estructura y funcionalidad del corazón para una mejor evaluación de ciertas cardiopatías.
¿Qué perfiles profesionales están implicados en su desarrollo?
Actualmente contamos con un equipo de veinte profesionales. Tenemos especialistas en ingeniería biomédica, IA y computación, además del asesoramiento de reputados cardiólogos. Uno de los puntos fundamentales dentro de Cardia by Apolo es contar con el mejor talento.
“Este modelo 3D permite un análisis de estructura y funcionalidad del corazón para una mejor evaluación de ciertas cardiopatías”
¿En qué fase se encuentra esta tecnología y cuándo prevén que pueda comercializarse?
Ahora mismo estamos en una fase de desarrollo, que pasa también por validación médica y certificación de producto, y esperamos poder comenzar con la comercialización el próximo año.
¿Cuáles son los resultados que se han obtenido hasta el momento?
Seguimos trabajando en su desarrollo y ahora mismo contamos con un prototipo que estamos evaluando y mejorando.
¿Qué otros proyectos tienen en marcha en Apolo AI?
Por una parte, en Cardia impulsaremos una segunda fase que pasa por añadir más funcionalidades a las actuales. Por otra, en Apolo, la intención es explorar la tecnología de imagen de Cardia para aplicarla a otros órganos.
